En la mañana de este martes, el presidente Juan Manuel Santos, pidió que haya elecciones generales en Venezuela con veedores extranjeros y un Consejo Nacional Electoral (CNE) independiente.
A través de su cuenta de Twitter, el mandatario expresó que “Ante el no reconocimiento” de los resultados electorales del pasado domingo, la solución es convocar veedores extranjeros, ya que en lo resultados que arrojaron, afirman haber ganado 17 gobernadores de los 23 que tiene el país
Por su parte, la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) denunció que hubo fraude en los comicios, no reconoció los resultados y pidió a la comunidad internacional que ejerza mayor presión contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
El resultado anunciado oficialmente es diametralmente opuesto a lo que manejaba la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), cuyas proyecciones de triunfo aumentaban, según todas las encuestas, si la participación superaba el 55 por ciento. Más con el anuncio de una participación “histórica” de 61,14 por ciento.
En medio de la pavorosa crisis social y económica que atraviesa el país, el resultado y la advertencia opositora tiñen de inmediato al proceso con la sombra de un fraude masivo, pues como expresó Blyde, no había proyección o encuesta que concluyera que el chavismo obtendría más de la mitad de las gobernaciones.
En comparación con los resultados de las parlamentarias del 2015, en estas elecciones el chavismo obtuvo casi 700.000 votos menos, pero la oposición perdió 2,8 millones de votos: un escándalo.
EFE