Al conocerse la decisión de la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata de hacerle un homenaje a Carlos Vives en la versión 51 de esta gran fiesta, surgió una gran polémica porque se esperaba el tributo a otros que han hecho un significativo aporte al folclor, pero así como la revolución que significó para el vallenato, ‘Clásicos de la provincia’, fue un trascendental reconocimiento a nuestra música, este Festival se constituye no solo en un evento que resalta la contribución del cantante samario, también se destaca todo lo que ocurrió con el vallenato desde su origen hasta contar con las fusiones y la modernidad con la que se estremeció Macondo.
Aunque con ‘Clásicos de la provincia’ muchos quieran conocer historias de Escalona, Leandro, Adolfo, Alejo, Juancho Polo, etc., y también saber más de legendarios acordeoneros, escuchar relatos de extraordinarios intérpretes, cajeros y guacharaqueros; la leyenda vallenata está conformada por otros fantásticos personajes que la enriquecen, que la defienden y permanentemente se preocupan por ella con un particular estilo, ese es el caso de Isaac León Durán ‘El Sabanón’ que arropa al Cesar y La Guajira”, la arropa desde hace mucho tiempo con sus ‘Vallenatos del momento’ desde que empieza con la melodía de grandes compositores que interpretara ‘El Cacique de La Junta’, muchos artistas acuden a colocar en consideración del experimentado hombre de radio sus trabajos musicales y con sus acostumbrados comentarios califica con peculiar gracia sus aciertos y errores, como la vez que el rey vallenato Juan José Granados se separó del cantante Andrés Ariza Villazón e Isaac, con su espontaneidad, le dice: “No se preocupe rey que con Ariza no ha pasado nada y no va a pasar nada tampoco”, por eso en una canción de Marciano Martínez, que grabara Diomedes con Álvaro López en ‘Listo pa’ la foto’, como venganza se le desea a otro compositor caer en la lengua de Isaac León; todo se debe a la contundencia con la que Durán habla desde su micrófono, no con el ánimo de destruir, por el contrario, lo mueve el honesto propósito de reconocer lo bueno y que se corrija lo malo.
Carlos Vives y Carlos Huertas con ‘El sombrero de Alejo’ recogen al sabanón y también le ofrece un justo homenaje al ser parte de esta canción con la que se invita al 51 versión del Festival y como Vives no es ajeno a la polémica, esta canción también provocó un serio debate por quienes pensaban que desplazaría ‘Ausencia sentimental’, de Rafael Manjarres, para esto Isaac, fiel a su estilo, dice: “No te preocupes que esto es promocional, esto es un jingle la otra es el himno del festival”.