Algo sobre
Por: José Romero Churio
El rescate de cuatro de los secuestrados por la guerrilla, sin muertos ni heridos, además de proporcionarnos inmensa alegría, es otra prueba de que la fuerza pública colombiana ha alcanzado un altísimo nivel profesional.
Sin embargo, es censurable, me imagino en procura de mayor gloria, que uno de nuestros militares de alto rango considere la ‘Operación Camaleón’ como cien por ciento colombiana, ignorando el aporte de Estados Unidos, cuyos gobernantes, entre otros apoyos, han donado helicópteros Black Hawk en los que se trasladaron los miembros de la fuerza especial, encargados del rescate sanos y salvos de los cuatro secuestrados, cuya liberación tanto nos regocija.
Aunque esta liberación es aplaudible, es indispensable mantener presente cuya ejecución pone en riesgo la vida de los secuestrados. A pesar de la discreta planeación y minucioso cuidado, en todo rescate militar el resultado es incierto; mejor dicho, es como recurrir al desafío irresponsable de la ruleta rusa, del cual se puede salir con vida, herido o ileso, asimismo se corre el peligro de morir.
El exitoso rescate de la ‘Operación Camaleón’ como el de la ‘Operación Jaque’, también nos demuestra el gran menoscabo de la guerrilla, situación que de veraz agrada a los colombianos, ya que en su mayoría desean su claudicación, tal como la huida de los guerrilleros que custodiaban a los cuatro secuestrados liberados.
La guerrilla, a pesar de los golpes recibidos por la fuerza pública y a su inescrupulosa condición de terrorista narcotraficante, pareciera que todavía conserva algo de raciocinio, ya que no se comporta como la mafia del narcotráfico que, en represalia, mata y asesina a todos los que les duelan a sus enemigos.
En esto último radica el temor y sufrimiento de los familiares de quienes aún quedan en cautiverio, que de seguir los rescates militares, mueran en el tiroteo o los asesinen los guerrilleros antes de huir y, por tanto, claman por el acuerdo humanitario que permita la libertad de los cautivos.
El presidente Uribe ha sido reacio al acuerdo humanitario, y demanda condiciones para llevarlo a cabo, exigencias que no son aceptadas por la subversión guerrillera y, en consecuencia, hasta ahora ha sido una situación, que en realidad produce cierta antipatía contra el gobierno, porque no cumple la obligación de defender y conservar la vida de sus gobernados, y a la guerrilla le aumenta la repulsión, no obstante a que ha tenido gestos humanitarios unilaterales liberando algunos secuestrados, teniendo siempre como intermediaria a la senadora Piedad Córdoba, a quien la ultraderecha la considera brazo político de las Farc.
Con relación al acuerdo humanitario, la posición del candidato presidencial, Antanas Mockus, es más dura que la del presidente Uribe y, por ende, que la del candidato Juan Manuel Santos quien defiende su política de seguridad democrática.
Otra vez se equivoca el Profesor, porque se contradice, pues es promotor del dialogo para la conciliación, pero en campaña es rotundo al manifestar que no hablará con la guerrilla mientras mantenga gente secuestrada.
Algo breve sobre el Mundial de Futbol: terminada la primera vuelta de la fase inicial del campeonato mundial de la FIFA, el desempeño de los favoritos no ha sido bueno. Los peores resultados lo han obtenido Camerún que perdió su primer encuentro y España el archifavorito perdió con Suiza; Italia apenas logró empatar; Argentina y Brasil ganaron apretados. Alemania derrotó al modesto Australia 4-0. Esperamos que en adelante veamos mejor futbol.