Por amable invitación del eficienterectorAlberto Luis Cuello Mendoza,y de la diligente decana de la Facultad de Derecho, Sandra Milena Acosta, participé en un ejercicio de simulación de las audiencias preliminares concentradas, propias de las sistemáticas acusatorias. La actividad se llevó a cabo en una de las dos salas de audiencias de la UPC, dotada con equipos tecnológicos de audio y video que tanta falta hacían para llevar a cabo de manera idónea el entrenamiento y adiestramiento de los estudiantes de Derecho para su futura práctica en las áreas procesales.
Se trata de una inversión del orden de $179 millones en sistemas integrados por dos módulos procesadores DSP para materializar el aserto de que el conocimiento que no se practica no persiste en nuestro espíritu, en consecuencia, los modernos equipos permiten conectar 64 unidades digitales para interactuar con los adelantos tecnológicos apropiados. Y aquí, de nuevo, bueno recordar la importancia de una buena formación teórica para un mejor acierto en los ejercicios prácticos.
Siempre me produce satisfacción participar proactivamente en el entrenamiento de los estudiantes para procurar habilidades y destrezas, a fin de que puedan afrontar de la mejor manera posible los roles que les corresponderá asumir en el ejercicio de la profesión de abogados. Con estudiantes de la asignatura de Derecho Procesal Penal II se puso en escena el desarrollo de una audiencia simulada en un proceso penal, para estrenar las modernas unidades de audio, video, grabación AV profesional y seguimiento de cámaras.
En el simulacro, el estudiante Emel José Benavides Saade desempeñó el rol de juez penal municipal en función de control de garantías; Sara Melissa Morales Sánchez, fiscal delegada; Isaac David Bautista Leal, defensa técnica; Giordan José Peña Rueda, como imputado; Sharonne Guerra Fernández, como agente del Ministerio Público; Isaac Bautista Leal, como representante de víctimas, y Lyda Marcela Gutiérrez Castillo actuó como secretaria del Juzgado.
A pesar de que no habían recibido orientaciones e instrucciones previas en el curso de Consultorio Jurídico Penal, se logró una mise en scena estupenda. Buena experiencia la que los estudiantes vivenciaron con adrenalina incluida en los registros iniciales y en los 15 minutos en los que en ensayo llevaron a cabo una audiencia preliminar de control judicial de legalización de captura, utilizando de manera apropiada los speakers profesionales en la sala de audiencias. Recuérdese que la formalización de rutinas junto con el desarrollo de hábitos generan las competencias que forjan los resultados.
Tuve la agradable sensación de que el rector Cuello Mendoza es un ejecutor y un funcionario decidido. No es un hombre de rodeos, conoce lo que hace y tiene buen equipo. En el acto de entrega de las salas y sus adecuaciones tecnológicas estuvieron acompañándolo la decana de Derecho, Sandra Milena Acosta, comprobadamente idónea y diligente; igualmente la activa directora de Departamento Rosa Isela Rodríguez Mendoza, como también Karina Fraija Arango, la diligente secretaria del Departamento de Derecho. El jefe de la Oficina de Planeación, el experimentado Álvaro Iglesias Ibarra, y el experto Francisco García Payares, vicerrector Académico, integran el equipo que componen las sinergias necesarias para erigirse en un grupo comprobadamente idóneo y efectivo. No cabe duda.
Finalmente se dirá que queda en los registros de la UPC un valioso aporte para, entre otros, el departamento de Derecho, porque hacía bastante tiempo que se reclamaban herramientas tecnológicas que posibilitaran el integral entrenamiento en sede de audiencias públicas simuladas (duré muchos años facilitando micrófonos y equipos personales para ese objetivo). Afortunadamente hoy se supera con la apreciable inversión que se ha llevado a cabo bajo la dirección del rector Alberto Luis Cuello Mendoza, quien sin aspavientos demuestra que los hechos son mejores que las palabras, por eso ¡La UPC va por buen camino!