No hay duda que uno de los mayores desafíos de las actuales administraciones del departamento del Cesar es la continuidad en el servicio de agua potable, principalmente en época de sequía. En el caso de municipios como Curumaní, cada verano se padece la falta de agua con racionamientos sectorizados. Algunos barrios demoran hasta 5 días sin que el preciado líquido corra por las llaves.
En ese sentido, el ingeniero Fabián Jácome, gerente de la Empresa de Servicios Públicos de Curumaní, Acuacur, explicó que la empresa decidió acudir a un crédito con Findeter por $977 millones con el propósito de construir pozos que respalden el abastecimiento de agua potable en época de sequía, cuando la cuenca del río San Pedro disminuye hasta un 70 %.
¿Por qué se tomó la decisión de acudir al crédito con Findeter?
Desde el programa de Gobierno y la campaña nosotros propusimos optimizar el servicio de agua. Compartimos dos propuestas: una a largo y otra a corto plazo. La de corto plazo es la construcción de unos pozos que nos ayudarán en época de sequía. Es decir, estamos buscando estrategias de contingencia para afrontar el verano que viene. En enero el caudal del río San Pedro disminuirá y obviamente el casco urbano de Curumaní se verá afectado.
También buscamos darle solución al manejo de las aguas servidas, las que llegan a la planta de oxidación. Esas aguas llegan, se tratan y luego sale un emisario final. Ese emisario vierte sus aguas a un canal conocido como San Ignacio. Ese canal que atraviesa parcelas y fincas no ha sido intervenido, por eso cuando hay precipitaciones se desborda inundando potreros.
Muchos propietarios de esa vereda, San Rafael, han pasado peticiones porque el ganado se ha enfermado. Nosotros aprovecharemos esta oportunidad de Findeter para limpiar este canal y que fluya de mejor forma esta agua.
¿Cuánto demoraría la construcción de los pozos?
Arrancamos con una oferta privada, que comprende los estudios hidrogeológicos. Estos estudios nos permitirán saber dónde se encuentra el acuífero óptimo para nosotros poder iniciar la perforación. Se pedirá el permiso ante Corpocesar y luego viene la fase de la perforación. Al final viene toda la instalación de los pozos acompañada de los paneles solares.
Los estudios demoran más o menos 8 días; la perforación puede durar dos meses. En todo el proyecto podríamos demorar entre 4 o 5 meses. Urge comenzar desde ahora. Gracias a Dios llovió bastante, pero ya irá aumentando la temperatura y eso se verá reflejado en el caudal del río.
¿Cómo se pagará el crédito?
El crédito está por un monto de $797 millones. No incluye interés alguno. Este crédito, como tal, lo dividieron hasta en 36 cuotas, de los cuales tres meses son de periodo de gracia. Importante recalcar que no supera la actual vigencia.
Mensual la empresa pagaría $24 millones por el crédito. En este caso fue el Ministerio de Vivienda el que realizó la evaluación con base a los estados financieros. Ellos nos certificaron que teníamos una capacidad de endeudamiento de hasta $900 millones. Posteriormente, me dicen que me puedo dirigir a la Financiera de Desarrollo Territorial, Findeter. Ellos también hicieron la evaluación financiera y la capacidad de endeudamiento. Ellos avalaron el valor de $797 millones, el aprobado.
¿Cómo está la empresa en materia de recaudo?
El tema de la pandemia nos afectó el recaudo, como en todo el país. Por eso se tomó la decisión desde la Alcaldía de incrementar los subsidios. Actualmente recaudamos aproximadamente $35 millones, aunque a veces baja a $30 millones. Por subsidio ingresan $70 millones.
¿La cuota se pagará con los ingresos de subsidios o de recaudo?
Con un porcentaje de ambos.
¿Qué podría pasar si no se hace esta inversión?
Nosotros para abastecer al municipio necesitamos una entrada de agua de aproximadamente 135 litros de agua por segundo. Cuando llega la sequía el caudal disminuye hasta un 70 % y nos vemos obligados a realizar racionamientos de agua extensos. Lo que queremos es blindarnos ante la sequía.
Por Redacción/EL PILÓN.