EL TINAJERO.
Por: José Atuesta Mindiola
El agua es la vida. Nuestro mundo es acuacéntrico. Ningún organismo vivo conocido puede vivir sin agua. En nuestro planeta el agua es escasa en un gran número de lugares y está mal distribuida.
La Organización Mundial de la salud (OMS) estima que el 80% de todas las enfermedades del mundo se deben a la inadecuada potabilización del agua y a la falta de higiene, así como los niños que fallecen diariamente por esas causas superan la terrible cifra de 4000. Alrededor de 1,8 millones de personas mueren anualmente debido a las enfermedades diarreicas (incluyendo el cólera) y de esos casos, un 80%, se debe a un inadecuado suministro de agua e higiene sanitaria.
La calidad del agua determina la calidad de vida en el ser humano. El agua es vitalidad, higiene, frescura, belleza, recreación, fiesta. Un pueblo sin rio es un pueblo triste. El agua es vivificante y milagrosa, es la única sustancia liquida que al congelarse aumenta de volumen, esto le permite al hielo flotar en los lagos o mares para que la variedad de seres puedan adaptarse y sobrevivir en las aguas heladas.
El agua tiene poderes sensoriales, casi similares a los seres vivos. El Japonés Masuru Emoto, un estudioso de la medicina alternativa e investigador de los diversos cristales del agua, ha tomado miles fotografías de distintos tipos de agua sometidas a variadas sensaciones, de sonidos musicales, de efectos de olores, de palabras escritas u orales, y nos sorprende con su poética del agua.
Esta novedosa investigación con sus diversas fotografías las presenta Emoto en su libro, Mensajes del agua. Entre las imágenes nos muestras las formas hexagonales que toman los cristales de agua al congelarse. Una gotas de agua sometida a la acústica de la palabra ángel y otras a la palabra demonio; el resultado de la primera unos cristales perfectos, simétricos, y de la segunda muestra, da unos cristales asimétricos. Algo similar sucede con una muestra sometida a los efectos sonoros de música clásica, mientras que a la música de reggaetón da cristales deformes.
Pero, tal como podemos aprender de las sorprendentes fotografías de Masaru Emoto, aquellos pensamientos de fracaso en sí mismos quedan también representados en los objetos físicos a nuestro alrededor. Ahora que somos conscientes de eso, quizá podamos comenzar a darnos cuenta de que, incluso cuando los resultados inmediatos no son visibles a los ojos humanos, ellos están ahí. Cuando amamos nuestros propios cuerpos, ellos responden. Cuando enviamos nuestro amor (no sentimos unidos) a la Tierra, ella responde.
Las anteriores investigaciones, son pruebas de que el agua, lejos de estar inanimada, está realmente viva y responde a nuestros pensamientos y emociones. Quizá, habiendo visto esto, podamos comenzar a entender realmente el imponente poder que poseemos al elegir nuestros pensamientos e intenciones, para sanarnos a nosotros mismos, así como a nuestro medio ambiente. Pero esto sólo será posible si creemos, respetamos y amamos la naturaleza.
DOS NOTICIAS DE LA SEMANA
I
Presentó su auditoría
Alba Luz la contralora,
y reveló sin demora
crímenes de ecología
que hacemos todos los días
contra el Rio Guatapurí,
y si esto sigue así
sin control ni prevención,
sólo va a quedar el zanjón
de sequías en frenesí.
II
El Consejo Superior
de la Universidad del Cesar,
al fin pudo designar
en propiedad a su rector,
es Raúl Maya Pabón,
y de esa manera se da,
fin a la interinidad
que estuvo por mucho tiempo.
Ojalá llegué el momento
de mejor la calidad.