Contra viento y marea se dio inicio a los Juegos Olímpicos con una ceremonia inaugural sobria pero cargada de mucha emotividad, donde Japón, el país anfitrión, envía un mensaje al mundo para que trabajemos unidos por el deporte, la paz, y el respeto por la diversidad.
El impactante desfile de las delegaciones de los distintos países. ¡Qué alegría ver a Colombia desfilar con sus deportistas luciendo el emblemático y mundialmente reconocido sobrero vueltiao!
El personaje homenajeado en esta oportunidad con el galardón olímpico, por sus contribuciones relevantes en las áreas de la educación, la cultura y la paz a través del deporte fue el bangladesí Muhammad Yunus, premio nobel de paz año 2006. El discurso de Thomas Bach, presidente del COI (Comité Olímpico Internacional), explicando las razones de dicha escogencia, fueron: “Yunus comparte generosamente su riqueza de conocimientos con los atletas y la comunidad olímpica, es una inspiración para todos nosotros. Ayuda a los atletas en desarrollo de su carrera después del deporte para que se conviertan en empresarios socialmente responsables y comparta nuestra visión de cómo el deporte puede contribuir a los objetivos de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas”.
Pero para saber más de este personaje tomemos las frases expresadas por este banquero economista, con las que ha cautivado al mundo empresarial: “La desigualdad es una bomba de relojería que debemos desactivar”. No obstante, cualquiera puede hacer un discurso retórico, lo complicado es ser coherente con lo dicho. Pues bien, siendo congruente con lo expresado a Yunus se le debe el haber inventado hace más de cuatro décadas un producto financiero conocido con el nombre de microcréditos, y cuya finalidad es hacer pequeños préstamos no tradicionales a la población vulnerable, como herramienta para el desarrollo económico.
Concepto que en nuestra opinión no se ha implementado en nuestro país, ni siquiera en pandemia, por cuanto por principio la banca nacional solo le presta al que tiene demostrada capacidad de pago, bajo el entendido que “los bancos se hicieron para ganar y no para perder”.
El crédito fácil se encuentra por doquier, a intereses elevados y plazos de un día, y se conoce con el nombre de “gota-gota”, pues la idea es exprimir al pequeño comerciante, y si queda mal lo “sacan de circulación”.
Por último, y a manera de síntesis citemos otra frase célebre de Muhammad Yunus: “La pobreza no la crea la gente pobre. Esta es producto del sistema que hemos creado, por ende, hay que cambiar los modelos y conceptos rígidos de nuestra sociedad”.
La nota de cierre: reina la expectativa frente a la decisión del juez constitucional (juez de tutela) en torno a la viabilidad del retorno a las clases presenciales. Surge la pregunta: la rama jurisdiccional por decisión del Consejo Superior de la Judicatura ha retornado parcialmente a la presencialidad, no hay atención al público a causa de la pandemia, y las demandas se siguen tramitando a través de la virtualidad. ¿Qué creen ustedes que va a fallar el juez, en relación con la población escolar? darioarregoces@hotmail.com