Los 99 goles que marcó el volante vallenato Omar Guerra Castilla, en sus 16 años de carrera como futbolista profesional, tienen un significado deleitable para el jugador que, literalmente, acabó de ‘colgar los guayos’.
No se lamenta porque le faltó uno para el gol cien, tampoco se trasnocha por esa hazaña que todo futbolista quiere lograr. Aunque le dijo adiós a su carrera activa como profesional del fútbol, Omar Guerra quiere anotar su último gol, y no precisamente a punta de gambetas o de sus acostumbrados remates fuertes, sino sacando de la descomposición social a centenares de jóvenes envueltos en el mundo de las drogas y los excesos.
Esa es la satisfacción del exjugador que militó en clubes de Colombia, Ecuador, Chile y Honduras. Anotar el gol más importante de su vida lejos de las canchas es el sueño intacto del exvolante zurdo, de 35 años, que terminó su carrera en 2015 vistiendo la camiseta del descendido Uniautónoma.
“Mi satisfacción es anotar el gol número 100 realizando una labor social con jóvenes que andan en malos pasos, eso me llena más que marcar en las redes. Por eso puse en marcha la Fundación Gol 100 Activa Tus Sueños, con la que pretendo formar personas de bien, son muchachos inmersos en los excesos y algunos de ellos andan en malos pasos, creo que con un trabajo integral podemos enderezar el camino de muchos de ellos”, explicó Omar Guerra, luego de participar en el Juego de las Estrellas que a medias se disputó recientemente en la cancha del barrio Doce de Octubre de Valledupar.
“Los zapatos me quedaban grandes”
Omar Guerra tiene una envidiable hoja de vida deportiva. Creció en el seno de su abuela Rita Graciela, la misma que sirvió de inspiración para salir adelante. “Mi abuela es una bendición de Dios, nos crío con mucho sacrificio, nos trajo desde Barranquilla cuando yo tenía 5 años, ella es nuestra mamá, es todo en nuestras vidas; nos dio todo el cariño y el apoyo que necesitábamos para salir adelante”, expresó.
Tiene el recuerdo intacto de su primer partido como profesional. Fue una noche de octubre 1997 en El Campín de Bogotá, escenario que fue testigo de un lujoso debut en el que marcó su primer gol.
“Fue un tiro libre en diagonal, ‘La Guama’ Cardona me dijo que como yo era chiquitico que picara en el primer palo que la iba a tirar por ahí. Y por ahí la tiró, impacté de cabeza y fue el tercer gol de Millonarios ante Tuluá. Ese gol fue a los cinco minutos de haber entrado, recuerdo que ese día no tenía guayos con qué jugar, ‘El Chiqui’ García me dijo que me preparará que iba a jugar y tuve que entrar con unos guayos prestados; yo soy 38 y jugué con unos 40, esa anécdota la recuerdo mucho”, remembró el jugador.
Ese fue el punto de partida de una carrera brillante para el jugador, sin embargo no olvida los momentos difíciles cuando quiso jugar en Junior.
“En 2007 llegué a un acuerdo verbal con Junior, pero en el primer entreno sufrí una lesión de ligamento cruzado y así difícilmente podían contratarme, duré un año sin jugar. Luego volví en 2009 al Técnico Universitario de Ecuador en donde anoté 16 goles, fui el mejor extranjero y botín de plata. Ese fue el equipo que me catapultó, porque en 2005 fui el máximo goleador en el fútbol ecuatoriano jugando con Aucas en donde hice 17 goles en un semestre, eso fue un momento importante en mi carrera deportiva”, recordó Omar Guerra, catalogado como uno de los mejores jugadores que ha salido de las canchas vallenatas.
Su trayectoria
Millonarios
Pereira
Aucas
Cuenca
Deportivo Quito
Técnico Universitario
Universidad Católica
Santiago Morning
Macará
Olimpia
Uniautónoma
Recomendado por el hombre que clasificó a Honduras a la Copa Mundial 2010, Reinaldo Rueda, Omar Guerra llegó al Club Deportivo Olimpia de Honduras, uno de los mejores equipos de Centroamérica.
Nibaldo Bustamante/EL PILÓN