Desde los años 70 Carlos Augusto Mejía Oñate, un hombre nacido y residenciado en La Paz, Cesar colecciona revistas, todas las que hablan de deporte. Allí en su casa del barrio Las Delicias del vecino municipio Mejía mostró un baúl repleto de ellas, muchas que hablan de los títulos del Junior, la participación de Colombia en los olímpicos de Munich o la victoria de Antonio Cervantes ‘Kid’ Pambelé ante el panameño Pepermit Frazer que abrió los títulos para nuestro país en el boxeo, igual enseña recortes de periódicos que tiene en los estantes, mesas y repisas, lo mismo en el escaparate, y en la paredes tiene pegado innumerables afiches de la selección Colombia y de sus otros amores, Barcelona de España y su glorioso Deportivo Independiente Santa Fe.
1.200 revistas
Con las 1.200 revistas que ha leído y luego guardado, la mayoría que tratan sobre fútbol, Carlos Mejía adquirió un gran conocimiento sobre el deporte, por ello llama a los medios de comunicación a corregir cualquier dato que el periodista o locutor haya dado en forma equivocada sobre un protagonista deportivo, esto lo ha familiarizado con la prensa deportiva de la que se siente amigo.
Esas 1.200 revistas las pone a la orden de los especialistas en deportes, igual guarda afiches de Carlos Araujo, ‘Kiko’ Barrios y los hermanos Pablo e Iván Zuleta, todos nacidos en el Municipio de La Paz y que estuvieron en el fútbol profesional colombiano.
Punto de vista
“Como añoro esas épocas gloriosas del fútbol de La Paz cuando aquí se respiraba deporte, los muchachos salían de la escuela a realizar deporte, todo eso lo hemos perdido, ahora salen los jóvenes pero para otras cosas”.
Carlos Mejía manifiesta que el último jugador de La Paz que salió para el fútbol profesional fue Wilberto Pana, después de él no ha pasado más nada, dice este hombre de 58 años que muestra las revistas El Grafico, Vea Deportes, Nuevo Estadio, Balón, Fútbol Total, algunas que ya no vienen y otras que las consigue en los almacenes de cadena de Valledupar o que las encarga a Bogotá.
El pulso del fútbol de La Paz
Manifiesta que su pasión por el fútbol viene de esas épocas gloriosas en las que jugaba al lado del Kiko, Carlos Araujo, Jesualdo ‘El Teso’ Marulanda, Eutimio Rodrígue; el popular ‘Mohino, y Edinson Mejía, nombre que lleva el estadio de su población.
Una anécdota
“En esas épocas grande del fútbol de mi pueblo jugábamos un campeonato intermunicipal, íbamos perdiendo 1-0 con Valledupar en el estadio Chemesquemena, me metieron faltando un minuto y me pusieron una bola cuando iba yo entrando al área, me tire en palomita y sé que conecté el balón, pero yo quedé por allá tirado, cuando vi fue a todos los pacíficos que corrían hacía mí. Yo había marcado gol pero no me di cuenta como entró la bola, el árbitro pitó final y empatamos 1-1”.
Cuando Carlos Mejía cuenta esta historia siente la nostalgia por lo vivido en su pueblo y se conforma con lo que viene haciendo el Valledupar F.C. por ello viene a ver cada uno de sus partidos en el estadio Armando Maestre Pavajeau.
“Todo se acabó aquí en La Paz, el vandalismo y la descomposición social en general acabaron con nuestro fútbol”