Uno de los grandes beneficios que tiene el barrio Los Fundadores es que cuenta con la Institución Educativa Técnico Upar que también tiene en el mismo sector su sede de primaria, José Antonio Galán.
Precisamente durante mi recorrido por este barrio me acerqué hasta dicho plantel en donde se están reactivando las clases luego del período de vacaciones.
Así tuve la oportunidad de conversar con Casimiro Rodríguez Castilla, coordinador de la jornada de la mañana en esta sede, quien me explicó varios aspectos relacionados con el proceso de formación de los estudiantes para este año.
Son 584 alumnos los que están recibiendo sus clases en los grados comprendidos entre preescolar y quinto de primaria.
Por la tarde asisten cerca de 200 menores que reciben sus clases a partir del segundo grado, ya que el preescolar y primero cuenta con jornada extendida.
De acuerdo con Rodríguez Castilla, hasta ahora continúan en la realización de un diagnóstico para evaluar cómo se encuentran a nivel académico los estudiantes, ya que muchos proceden de otras instituciones.
Igualmente explicó que seguirán cumpliendo con los lineamientos que les establece el Ministerio según lo cual tienen unas tareas relacionadas con la parte ambiental, educación sexual, democracia y los valores para mejorar la convivencia.
De esta manera, a nivel ambiental, cuentan con un proyecto que es liderado por el profesor de ciencias naturales del plantel a través del que se trata de mantener a los estudiantes informados para que sepan cómo desarrollar sus actividades sin ir en detrimento del medio ambiente.
“Procuramos mantener nuestro patio limpio por ejemplo”, aseguró el coordinador. Al tiempo recordó que vienen en un proceso también para fortalecer más la parte didáctica y pedagógica con el fin de mejorar la parte académica, para lo cual cuentan con el acompañamiento del Ministerio de Educación a través del programa ‘Todos a Aprender’ que ya se está implementando hace varios años.
TAREAS PENDIENTES
A pesar de que la sede José Antonio Galán tiene en términos generales unas buenas condiciones para sus alumnos y profesorado, todavía existen algunas cuestiones pendientes.
Por ejemplo, se encuentran a la espera de que se inicie la jornada extendida con el comedor escolar ya que sigue sin contratarse la alimentación.
Algo parecido sucede con la contratación del personal de servicios varios que hasta el momento asiste, pero no cuenta con el salario.
Con relación a la infraestructura hay algo muy importante para esta comunidad que tiene que ver con las baterías sanitarias puesto que ya se encuentran deterioradas por el paso del tiempo.
Igualmente están en busca de una estrategia para darle manejo al tema de la presencia de palomas que en cierta medida les generan dificultades porque se ubican en el mismo escenario en el cual los niños tienen el espacio para practicar deporte.
Aunque ya han hecho la solicitud para tomar una medida al respecto, todavía no ha sido posible. “Entiendo que tiene que ver con los Bomberos aunque no sé qué resorte tengan ellos”, sostuvo Rodríguez Castilla.
Sin embargo, el comandante del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Valledupar, Darío Mejía Araújo, explicó que el tema de las palomas no es competencia de dicha entidad y que se debe buscar otra solución al respecto, aunque dejó en claro que ellos pueden prestar colaboración para alejar a estas especies sin desconocer que no sería algo definitivo, puesto que los animales pueden volver.