Ahora que el vallenato anda en jet y toma auge la economía naranja en virtud de la ley 1834 de 2017 que impulsa la industria creativa y cultural a través del talento musical de nuestros intérpretes (cantantes, acordeoneros, cajeros, compositores, etc.), es preciso aclarar el concepto de folclor para no rayar en la imprecisión.
El folclor, tal y como lo define el sociólogo y académico, Luis Felipe Palencia Caratt, es una gama variadísima de las manifestaciones de la cultura popular, pero lo que más difunde es la música y sus instrumentos, de ahí que también sea folclor la leyenda, mitos, ritos, cuentos, chistes, apodos, dichos, proverbios, romanceros, cancioneros, apodos, sátiras, fiestas y regocijos populares, coplas, fábulas y adivinanzas.
En el contexto universal toma mayor relevancia el acordeón como instrumento líder, sin menoscabo de una idea genial propia de los poetas, que nacen, gestada y materializada por el compositor Beto Murgas, creador del museo del acordeón en Valledupar que colecciona la historia de este instrumento en sus diferentes épocas.
La palabra museo tiene la equivalencia de universidad, de cátedra que desarrolla una visión objetiva y se remonta al año 331 antes de Cristo, cuando Alejandría por su imponente museo de observatorios astronómicos, jardines botánicos y laboratorios se convirtiera en la capital científica del orbe, fundada por Alejandro Magno.
La Casa Museo del Acordeón Beto Murgas armoniza con los Museos Vaticanos de Roma, donde se conservan obras de la talla de la creación de Adán, de Miguel Ángel; el Museo de Louvre en Francia, el más popular del arte contemporáneo, con 35 mil objetos de valor histórico y artístico, incluida La Gioconda, la famosa obra de Leonardo da Vinci; el Museo Británico, uno de los más antiguos del mundo, recibe 5 millones de visitantes cada año; Galería Uffizi en Florencia, Italia, alberga el nacimiento de Venus de Sandro Boticelli, el Diario de Ana Frank, sobreviviente del holocausto Nazi, reposa en el Museo de Amsterdam, y el Museo de Guanajuato en México, símbolo de la Libertad, entre los más importantes del planeta.
Según la Fabulación Literaria Helénica, el término Museo está asociado con las 9 Musas que habitaban en el Parnaso y protegían el cultivo de las ciencias y las artes liberales. Son ellas Clío, representaba la historia; Calíope, la elocuencia; Euterpe, la música; Talía, la comedia; Melpómene, la tragedia; Polimnia, simbolizaba la lírica; Erato, la poesía erótica; Urania, la astronomía y Terpsícore, la musa de la canción.