X

“El Cesar y la región necesitan generar riqueza autosustentable”: Juan Angulo

Juan Daniel Angulo. FOTO/CORTESÍA.

EL  PILÓN recoge impresiones de cesarenses en el país,  o fuera, al igual que de  guajiros, que se han formado en carreras mineras para indagarlos sobre su visión de nuestro territorio y el futuro de la minería. Juan Daniel Angulo es docente, consultor,  columnista y comentarista de algunos medios de comunicación.

¿Quién es Juan Daniel Angulo?

Soy vallenato, nací hace 43 años en el Barrio 12 de Octubre, hijo de Nelda Argote y Liberto Angulo, el menor de tres hermanos. Me considero un hombre familiar, casado y con tres hijos. Docente, académico, asesor y columnista en varios medios de carácter  nacional.

¿Desde cuándo te estableciste en el departamento de Boyacá?

Hace alrededor de 24 años salí de Valledupar a estudiar lo que hoy es mi pasión, la geología. Estudié Ingeniería Geológica en la UPTC de Sogamoso y allí conocí a mi esposa. Conseguí dos títulos en esos más de 5 años. Empecé a trabajar en la empresa Prodeco, Mina Calenturitas (La Loma, Cesar).

Luego ingresé al Cerrejón en La Guajira, y más tarde me trasladé a Cerro Matoso en Córdoba. Estuve cerca de 8 años en esa región, donde tomamos una decisión en familia respecto a mi vida laboral como empleado en el 2012. Desde ese momento me enfoqué como consultor independiente en proyectos relacionados con los recursos naturales. Regresé nuevamente a  Boyacá, usted sabe que la esposa hala mucho, además de que es un departamento que tiene mucho que ofrecer y con cosas interesantes para aprender y replicar. Llevamos 8 años viviendo ahí.

¿Tus estudios?

Como lo dije anteriormente, estudié en la UPTC Ingeniería Geológica, más adelante cuando estaba trabajando en la empresa Cerro Matoso me envió a realizar una especialización en Evaluación Geoestadística de Yacimientos en la Universidad de Chile, al llegar a Sogamoso me vinculé con la UPTC como docente ocasional, aunque de tiempo completo por tres años, me aparté por un tiempo y regresé a Chile para realizar un Magíster aprobado con distinción en minería de la misma universidad.

¿Qué haces ahora?

Ahora soy docente de posgrado en universidades del país, y trabajo con el Instituto Sustentable de Canadá como asesor y consultor de varios proyectos mineros a nivel nacional e internacional. Además trabajo con un grupo multidisciplinario, donde estamos capacitando a funcionarios públicos de los países de la Alianza del Pacífico con la Universidad de Dalhousie (Canadá).

Sin duda, una de mis mejores experiencias, la resolución de conflictos y gestión de las partes interesadas en la industria minera y de hidrocarburos.

¿Desde hace cuánto eres columnista?

Empecé a escribir en el periódico Entérese en Sogamoso hace tres años, de allí pasé a escribir con el Boyacá 7 Días. Actualmente todos los jueves se publica una columna referente al desarrollo que se le deben dar a los recursos naturales en el país ligado a temas actuales. Soy estudioso de la economía aplicada para transformar los recursos en riqueza financiera como lo vienen haciendo los países N1 del Asia.

 Tengo un libro de edición española, también dos documentos registrados como obras inéditas,  en los que propongo el concepto de minería renovable, no es subterránea ni a cielo abierto, y en ese tema Colombia y los departamentos del Cesar y La Guajira  se pueden transformar.

El Cesar y su potencial minero. FOTO/REFERENCIA.

¿Cómo participas en el Blog El Espectador?

Un amigo periodista de Boyacá me contactó con el Blog el Espectador; ha sido una gran experiencia que me ha enriquecido con la retroalimentación que me  hacen los lectores habituales de mi blog, llamado Minería sin escape, he publicado cerca de 50 columnas hasta la fecha.

¿Cuál es tú visión de la industria minera nacional?

Partamos de la historia del ayer y la que actualmente vive el país. Si la minería no encuentra la ruta que permita jalonar otras economías, no es solo generando empleos, pagando impuestos y regalías, seguiremos en más de lo mismo,  un poco mejor. Necesitamos que los actores interesados hagan parte de todo el proceso, por ejemplo, no es posible que la minería en tantos años no haya desarrollado patentes de conocimiento.

¿Qué pasa? La industria, academia, gobierno y comunidades no se reparten la torta, y para ello se necesita escuchar las necesidades de cada uno y sus compromisos. La minería debe verse como un aliado estratégico, así se transforman los territorios. El cobre en Chile es el motor de su desarrollo; gracias al metal y a sus políticas públicas, los chilenos poseen el fondo soberano de inversión de la región con el mayor ahorro para sus próximas generaciones. La minería debe ser sustentable, en Colombia hasta la fecha no lo ha logrado.

¿Qué piensas de la vocación minera y proyecciones de su departamento del Cesar y La Guajira?

El Cesar, así como La Guajira,  posee grandes riquezas de minerales y recursos naturales, sol, agua, suelos, viento y demás, donde la vocación minera se ha enfocado en generar empleo sin manufactura. La manufactura con la vocación minera genera crecimiento y desarrollo, sino existe ese matrimonio, los resultados saltan a la vista, caso actual la anunciada partida de Prodeco.

Todos recordamos la época de Acerías Paz del Río en la provincia Sugamuxi, fue el aliado para generar en aquellos tiempos la industrialización de esa región sin olvidar su vocación agrícola. ¿Cuántas piezas de alta complejidad se han desarrollado en la minería en el departamento del Cesar? Me atrevo a decir que ninguna. La minería con políticas públicas con mirada periférica genera riqueza basada en el conocimiento.

Se avecina la fiebre de los metales y la activación agrícola. ‘Antes de’ se necesita realizar procesos participativos, así se hace en muchos países, para conocer cada necesidad y aclararlos con compromisos por parte de cada actor, sino no sucede esto se repite la misma historia, y seguirán hipotecando  el futuro.

¿Te gustaría regresar a tu tierra?

Siempre lo he anhelado y aún sigo afilando el hacha, porque algún día sueño en regresar y aportar más que un granito de arena. Conozco las necesidades de mi región, sus problemáticas y sus fortalezas,  solo necesitamos  abrirnos al mundo, es el momento de dejarse de mirar el ombligo. Como dice José Gabriel Palma, el mejor economista de la región, los analfabetas del siglo XXI no son aquellos que no saben leer ni escribir, sino aquellos que no son capaces de desaprender y reaprender.

¿Qué le quieres expresar a tus paisanos?

Necesitamos tomar el toro por los cachos, no más aventuras pasajeras con los modelos económicos que se vienen aplicando en sus nichos, con el paradigma de la no transformación de los recursos naturales, se  tiene mucho potencial, y es cosa del pasado limitarnos solo a administrar y gestionar recursos, el Cesar, y en general la región, necesita generar riqueza autosustentable, y eso lo tiene a la vuelta de la esquina.

POR: REDACCIÓN EL PILÓN.

Categories: Entrevista
Redacción El Pilón: