Nadie quiere quedar por fuera en la carrera presidencial y las figuras empiezan a moverse sobre el tablero blanco y negro a la luz del día, provocando nuevos escenarios y atomizando la discusión nacional, hacia una tercera opción más rentable electoralmente, que la que hasta ahora se manifestaba.
Exploramos en un artículo anterior, la idea sobre la cual, no hay tiempo para pensar en segundas vueltas, y acorde a esto, en las últimas horas hemos visto a los candidatos Sergio Fajardo y Rodolfo Hernández coquetear con la idea de una coalición, que traería sin lugar a dudas una posición más fuerte para ambos en la primera vuelta.
Por el lado de Federico Gutiérrez, se propone darle más visibilidad a su candidato a vice, el Dr. Lara Sánchez, quien en las matemáticas de la campaña, aportaría la cuota de centro, que en principio se perdió por caer desacertadamente en una comunicación de confrontación polarizante, que alejó al candidato de su natural y necesario liderazgo conciliador.
Su representatividad hoy se ubica definitivamente hacia la derecha y esta no parece ser una situación favorable para la campaña, ya que, en los escenarios sociales actuales, prima entre los sectores populares, un discurso de descontento e injusticia social.
El Festival Vallenato aparece como una gran vidriera de lo acontecido y por acontecer.
Por un lado, Iván Duque Márquez empieza a despedirse de sus funciones, recibiendo elogios y agradecimientos de los máximos referentes departamentales y locales, mientras se escuchan de fondo unos tímidos silbidos en la renovada y tradicional plaza Alfonso López, que habla a las claras de ciertos descontentos por parte de la sociedad colombiana, haciendo sobre el escenario un contrapunto digno de las mejores piquérias.
Por su parte la esposa del candidato Gustavo Petro, Verónica Alcocer, baila al ritmo de las Piloneras haciendo gala de su arraigo cultural con la región caribe y a su paso recibe aplausos a favor y cánticos en apoyo a otros candidatos, todo es válido, la democracia también se debate en las calles. Nada está librado al azar.
Después de su fallido intento por aterrizar en la capital mundial del vallenato, donde un Gustavo Petro acostumbrado a grandes multitudes no lo esperaban más de 500 personas, inteligentemente se corrió de la fotografía y llevó a movilizar a su lado más encantador, para que fueran ellas quienes abriesen el camino hacia la consolidación de la propuesta en la región, Francia Márquez y Verónica Alcocer fungen como los motores que atraen los colectivos de mujeres cabeza de hogar y negritudes, de mujeres indígenas y desplazados.
Jaque… los peones de Fajardo y Hernández están a punto de coronar y hacer su metamorfosis.
Jaque… el enroque de Gutiérrez lo defiende y proyecta.
Jaque… la reina y el alfil de Petro están en movimiento.
Un mes para que el futuro nos alcance a todos y se escuche, Jaque Mate.