Seguramente la palabra covid-19 definirá la historia general del 2020: el virus fue el culpable de toda la incertidumbre que se apoderó del mundo. Destruyó sueños, hizo daño y replanteó nuestro estilo de vida. Desafió lo que somos. Y mostró las fallas existentes, los desequilibrios y las inequidades. Aunque la crisis afectó a todos, son mayores los golpes que acusaron los excluidos, los migrantes, los hacinados, los desnutridos, los pobres.
Pero a todos los desafíos les encontramos respuestas. Hasta vacunas, aunque sean primero para los países ricos, porque los de esta parte del mundo, Latinoamérica, África y Asia pobre, no tuvimos la forma de crear ninguna vacuna ni de intentarlo.
Ante la suspensión de los eventos masivos, los empresarios apostaron por conciertos virtuales, y aquí nacieron experiencias luego imitadas, como La Caja de Música, que exaltó la Cámara de Comercio; lo hizo la Fundación con el primer Festival Vallenato virtual, inédito también porque Manuel Vega quedó al fin como rey vallenato.
Continuamos: ante la suspensión de las grandes producciones audiovisuales hicimos el festival de cine con celular; ante la prohibición de las reuniones, los foros fueron virtuales; ante el cierre de las clases y las sesiones presenciales, fueron virtuales. Los foros y conversatorios y ferias de EL PILÓN se mantuvieron, en otra modalidad, y pudimos celebrar la feria gastronómica, el foro de salud, dos de educación, el de conectividad, los de regalías y los de jóvenes y de bloques opuestos de diputados y concejales. Lo anterior, solo por nombrar unos casos.
Hoy es el día 365, el último del año 2020 según el calendario occidental. Durante 8.760 horas los alcaldes del Cesar enfrentaron a un virus que agravó todos los problemas arraigados en la región. La mayoría demostró estar preparado para el reto; no desilusionaron. La crisis económica es el mayor reto con el desempleo desbordado.
En la cosa política del Cesar algunas cosas siguen iguales, el gobernador Monsalvo fue elegido, defenestrado del cargo y vuelto a poner, pero hay nuevos rostros, especialmente de alcaldes alternativos que se enfrentaron a poderes tradicionales y les ganaron con creatividad y arrojo. De sur a norte, aún tienen tres desafiantes años para cumplir las expectativas de quienes los eligieron. Mientras el alcalde vallenato buscará un lugar para dejar de saldo una gestión trascendental.
El año 2021, en realidad, tendrá un comienzo diferido, y solo podrá entrar en forma de cambio y periodo el día en que se declare que se habrá superado la pandemia y la inmunidad se haya generalizado. La carrera la ganarán los países que inicien el año más pronto. Por eso es tan importante ir produciendo en la fábrica de nuestros impulsos y desafíos, los anticuerpos del tesón y la disciplina, el foco en la superación de los dramas humanos, las privaciones y las felicidades reprimidas.