El gobierno estadounidense prohibió las operaciones que involucren criptomonedas venezolanas, intensificando la presión de Washington sobre el régimen de Nicolás Maduro.
La orden ejecutiva firmada por el presidente Donald Trump prohíbe a toda persona o compañía sujetas a las leyes estadounidenses realizar transacciones con “cualquier moneda digital” emitida por el gobierno de Venezuela después del 9 de enero del 2018, incluyendo al llamado Petro.
“La Secretaría del Tesoro, en consulta con la Secretaría de Estado, está autorizada a tomar estas acciones (para cumplir con la orden ejecutiva), incluyendo la emisión de reglas y regulaciones”, declara el pronunciamiento presidencial.
“Todas las agencias del gobierno de Estados Unidos deben tomar las medidas apropiadas dentro de su autoridad, para ejecutar las previsiones de esta orden”, agregó.
La medida forma parte del esfuerzo del gobierno estadounidense por “enfrentar la endémica corrupción y mala administración económica de Maduro”.
Reacción de Maduro
Al respecto, el Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro denunció “la persecución ilegítima, inmoral, absurda del gobierno imperialista de míster Donald Trump contra el pueblo de Venezuela; es una persecución criminal”.
Aseguró que el veto de Estados Unidos a su criptomoneda es una “persecución criminal” para impedir la recuperación económica y afectar el bienestar de los venezolanos.
Maduro, quien dijo que entregó 2,3 millones de petros -unos 138 millones de dólares según el valor anunciado- para construir 236.000 casas, afirmó que Washington trata de impedir que el dinero de la venta del activo se invierta en el “bienestar del pueblo”.