El peor y más reciente embuste que he escuchado es el que afirma de manera categórica los beneficios tan grandes que ha recibido el Valle de Upar y su comarca con un presidente como el que entrega su cargo este fin de semana. El gran Duque o Iván el Terrible como ya le llaman otros. Un amigo del Valle, también se le denomina.
Y claro, no es para menos, parece que nunca antes Valledupar había tenido tantos altos cargos directivos juntos en un gobierno nacional, parece que después de Alfonso López Michelsen a ningún otro presidente le había gustado tanto esta música y esta tierra como al presidente que se despide.
Fueron muchos los posesionados y también los condecorados en la casa de nari, en este oscuro periodo que por fortuna ya se acabó.
Iván el terrible, el que celebra su despedida cantando ‘La patillalera’ a orillas del río Badillo y al pie del cerrito de las cabras, mientras grupos al margen de la ley ejecutan un plan pistola contra nuestra fuerza pública, el que se siente vallenato porque según él su padre fue uno de los fundadores del festival. El mismo que con la lengua empelotada por el Old Parr se envalentona y amenaza a los victimarios cuando se siente con el sol a las espaldas.
Es cierto que ni en la época dorada de los Araujo, cuando se llegó a tener cancillería, procuraduría y demás, llegamos los vallenatos a ostentar tanto poder: ministerios, viceministerios, departamentos administrativos, unidades administrativas especiales, institutos y mejor no sigo. La pregunta es. ¿Se ve esto reflejado en un mejor vivir de los vallenatos? o simplemente tenemos unos jóvenes nuevos ricos en el Valle y con la incertidumbre de que algunos de ellos terminen en la picota.
El más joven de los presidentes parranderos quiso despedirse del gobierno, supuestamente rindiendo un informe de los avances de su cacareada economía naranja y de los beneficios que recibió la música vallenata de esa política pública, que entre cosas, no va más en el nuevo gobierno, sencillamente porque el equipo de empalme descubrió que la economía naranja no se sabe que es.
Pero a algún mago del gobierno se le ocurrió la brillante idea de condecorar a 20 artistas vallenatos entre compositores e intérpretes y de realizar esa actividad nada menos que en Patillal, tierra de compositores y cuna del maestro Escalona.
Dos preguntas que algunos aun nos hacemos son: ¿Quién hizo la lista de los condecorados y de los invitados al evento de Patillal? ¿Cuáles criterios se emplearon para seleccionar a los condecorados, por qué esos y no otros?
Si escogen a Patillal como la población donde Iván ‘El Terrible’ rendiría el tal informe sobre el impacto de sus políticas públicas en la música vallenata, ¿cómo no se les ocurre homenajear o por lo menos invitar a Edilberto Daza y a Fredy Peralta?, quienes sin duda triplican en méritos a varios de los escogidos a dedo no sé por quién. Qué manera de cerrar con broche de oro este trago amargo que tuvimos los colombianos.
COLOFÓN: Este sábado a las 5:30 de la tarde La Parranda de Nain, el programa de redes sociales, se estrena en televisión por cable. Las entrevistas musicalizadas a los artistas vallenatos se seguirán transmitiendo por Facebook y YouTube, pero ahora llegan recargadas al canal local CNC Valledupar. Nos vemos en CNC.