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Según la Drummond, el 15 de enero, la Capitanía de Puerto efectuó visita de inspección al puerto y “comprobó la flotación de la barcaza y la total superación de la contingencia”.
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Una barcaza de la multinacional Drummond, que estuvo a punto de hundirse entre la noche del 12 y la mañana del 13 de enero en el puerto de Ciénaga, Magdalena, provocó la investigación contra la empresa.
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Capitán del Puerto dijo que la compañía admitió que depositó carbón en el mar para evitar naufragio.
Drummond podría pagar una sanción por valor de hasta dos mil 947 millones de pesos, equivalentes a cinco mil salarios mínimos si la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, Anla, llegara a comprobar que la compañía tiró carbón al mar; el objetivo para botar el mineral sería que la embarcación en la que se transportaba el carbón no se hundiese.
A través de un comunicado la multinacional carbonera reconoció que entre el 12 y la mañana del 13 de enero pasado, se registró una emergencia por mal tiempo con una de sus barcazas y fue necesaria la evacuación de agua mezclada con carbón para evitar el hundimiento.
“En el transcurso de la noche, esta barcaza recibió agua de mar en su interior, lo que generó un conato de hundimiento y la necesidad de actuar según el plan de contingencia, de acuerdo con los protocolos internacionales de operación marina que enseñan, en primera instancia, a salvaguardar la vida de los seres humanos y en segundo término, a evitar el naufragio de la embarcación, para así conjurar cualquier desastre marítimo y ambiental mayor”, señala la comunicación de Drummond.
La tarea de la ANL será establecer causas, derivaciones y responsabilidades por el derramamiento de una cantidad del mineral caída al mar, aún no establecida por parte de Drummond, así lo anunció la Corporación Autónoma Regional del Magdalena.
“Un proceso de investigación para ver que sucedió. Definir y pronunciarse y en eso estamos”, declaró el director de Corpamag, Orlando Cabrera.
Sindicalistas de la empresa aseguran que el daño ecológico es incalculable, “Una grúa mete su balde a la barcaza prácticamente hundida y en vez de colocar otra barcaza al lado para evitar el impacto ambiental hacen lo más fácil, lo arrojan al mar”, explicó Aníbal Pérez, presidente del sindicado de la Asociación de Trabajadores Enfermos de Drummond Puerto, Asotredp.
Los trabajadores manifiestan que una situación similar se registró en diciembre de 2010 con otras tres barcas.
La emergencia
Luego de la emergencia que sufrió una barcaza de la multinacional Drummond, que estuvo a punto de hundirse entre la noche del 12 y la mañana del 13 de enero en el puerto de Ciénaga, Magdalena, la autoridad marítima aseguró que no tuvo conocimiento sobre el supuesto depósito de carbón en el mar por parte de la empresa.
Guillermo Díaz, capitán de Puerto de Santa Marta, dijo que “en ningún momento se tuvo conocimiento de que Drummond descargó el material en el mar, ni fotos, ni informes, ni absolutamente nada”.
En entrevista con W Radio, Díaz afirmó que apenas el jueves, en la mesa ambiental que se reunió con la multinacional, se “mostraron las imágenes donde estaban depositando el material en el mar”.
Sin embargo, el funcionario dijo que en reunión que se sostuvo el viernes anterior con representantes de la carbonera, la compañía admitió que depositaron carbón en el mar.
Al encuentro también asistieron funcionarios de la Procuraduría del Medio Ambiente y la Corporación Autónoma Regional del Magdalena, entidades que con el Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras, ‘Invemar, harán un informe técnico sobre la afectación ambiental en la zona donde se descargó el carbón, para determinar sanciones contra la empresa.
“Se realizará un análisis de las afectaciones que pudo originar depositar ese material en el área, se van a tomar muestras y se va a comparar todo lo que hay en el mar y las playas para determinar si hay esa correspondencia en las muestras y tomar una acción jurídica”, explicó Díaz.
La Drummond argumentó, en un comunicado, que procedió a sacar de la barcaza el agua que se había mezclado con el carbón, según el plan de contingencia, para salvaguardar la vida de las personas y para evitar el naufragio de la nave.
Por su parte, el capitán Díaz aseguró que la multinacional debió depositar ese mismo material en la grúa o en otra barcaza, en lugar de lanzarlo al mar.
“Eso no está contemplado en ninguna parte, ellos no pueden verter todo este material al mar”, añadió.