X

Droga, la peor enemiga de los jóvenes

De diez pacientes que llegan al Hospital Rosario Pumarejo de López para atención en salud mental, cinco o seis caso corresponden a consumo de droga.

La preocupación de los médicos del Hospital Rosario de López, en especial de los psiquiatras, está relacionada con los casos de dependencias de las drogas o sustancias psicoactiva en menores de edad, porque atienden niños desde los 9 años que ya están metidos en este oscuro mundo de las drogas.

Para el médico psiquiatra, Hugo Soto, es terrible esta situación del consumo de droga en niños y adolescentes. “De diez pacientes que son atendidos en la parte mental, cinco o seis son por fármacos. Esos muchachos llegan con una agresividad, no solo con sus familia sino con las personas que están a su alrededor”, indicó el especialista.

Enfatizó que la mayoría de esos jóvenes se salen de sus casas, provienen de hogares disfuncionales que se refugian en la droga, y esto es un problema delicado porque cuando esas personas no consiguen lo que quieren, es decir, que no consumen droga, se enloquecen, de ahí la razón de que sea un problema grave.

Según el análisis, lo que más se consume son: perico, marihuana, seguida de basuco y por último cocaína, “esto está plagado porque llegan casos de hasta consumidores de bóxer”. Los jóvenes acceden a este tipo de sustancias por ser las más económicas, que se pueden conseguir en cualquiera de las ollas de droga que existen en la ciudad.


Causas y daños 

El médico psiquiatra indicó que las causas de este problema radican en la familia, porque son muchachos que no tienen papá ni mamá; los padres se van de la casa y a la mamá le toca salir a la calle a trabajar, dejando solo al muchacho, de ahí que lleguen amigos y los conduzcan por malos caminos en el consumo de droga; de ahí surge el problema, porque comienzan a cogerle el gusto a dicho consumo, se crea la dependencia y, después, es difícil salir de allí.

Entre los daños que causa la droga en el organismo, está el daño mental, dependencia del abuso de estas sustancias, los cortos circuitos cerebrales, que pueden conducir hasta la locura; también, se afectan los pulmones, los riñones, el hígado y, en general, se altera el metabolismo.

Según estudios, en lo que respecta a la marihuana, daña el cerebro, además produce alucinaciones, depresión, delirio de persecución, melancolía, pánico, paranoia, agresividad, aumento del apetito, convulsiones, bronquitis crónicas, disminución de las defensas orgánicas, disminución de la síntesis de la testosterona, lo que produce impotencia y esterilidad en los hombres y, en las mujeres, genera frialdad sexual, desarreglos menstruales y disminución de la prolactina.

Por su parte, el basuco afecta el hígado, las vías respiratorias, produce agotamiento, insomnio,  depresión permanente, paranoia, agresividad, vejez prematura, impotencia sexual, pérdida de la memoria; se considera la droga más mortal. 

Sin sitio adecuado 

Además de la preocupación por el aumento de casos de este tipo de pacientes, hay otra, como es que en la ciudad no existe un sitio adecuado para atender a estas personas que tienen problemas con el consumo de estas sustancias psicoactivas.

 “Así como se creó el grupo de alcohólicos anónimos, de la misma manera se debería pensar en crear un grupo para la atención de estos niños y jóvenes que tienen tendencias a la droga”, enfatizó el médico Hugo Soto.

Agregó que no hay un sitio en la ciudad adecuado para la atención de estos pacientes, anteriormente estaban los grupos CREA que funcionaban en Barranquilla, pero esto yo no existen.

Los pacientes que tienen este tipo de problemas, la mayoría son remitidos a Barranquilla; hay un caso de tres muchachos que les dieron tratamiento largo, de cuatro a cinco años, debido a que era constante que llegaran al centro asistencial, ellos fueron remitidos a Bogotá a clínicas especializadas y para ser atendidos fue necesario recurrir a tutelas. 

“Con los muchachos es difícil que tomen conciencia de la situación de la drogadicción, de las causas y consecuencias; son muchachos que sufren mucho, es muy difícil, pierden el hogar, la academia, la salud, todo”, enfatizó el médico psiquiatra.


Síntomas

  • Cambios de amigos, les gusta andar con adictos a las drogas para sentirse apoyados.
  • Cambios de actitud, se tornan agresivos y alejados de la familia.
  • Vestimentas raras.
  • Se hacen tatuajes.
  • Comienzan a fallar a clases en sus colegios.
  • Bajo rendimiento escolar.
  • Bajo estado de ánimo.


 

Categories: General
Periodista: