De las votaciones legislativas de ayer y las ‘primarias’ de las coaliciones de candidatos a la presidencia de la República podemos decir que no hubo sorpresas sustanciales, respecto a lo que se intuía en el ambiente y se empezó a reflejar en las encuestas, en el panorama político regional y nacional. Las estructuras políticas regionales y locales se mantienen intactas y los gobernantes departamentales y municipales, con sus aparatos electorales, definen en gran medida las elecciones.
Había, en el ámbito departamental, un gran interrogante sobre las posibilidades de la lista del Pacto Histórico a la Cámara de Representantes, y el guarismo alcanzado – con el empuje de viento de cola de la corriente nacional de Gustavo Petro- superó con creces lo que los otros sectores políticos, y analistas locales, vaticinaban, aunque esa votación no significara, al cierre de la presente edición, que podía alcanzar una de las cuatro curules de la circunscripción territorial del Cesar. Por el contrario, los resultados muestran una consolidación de la Casa de Gobierno Departamental y sus aliados; un mayor cerrojo evitando que se representen y se hagan escuchar nuevas alternativas políticas. En el caso de la circunscripción especial transitoria de paz, de municipios de los tres departamentos, el ritmo y el resultado lo marcó el Cesar, ahí la Casa de Gobierno Gnecco Monsalvo no pudo ejercer su dominio.
En La Guajira se eligieron dos senadores, Alfredo Deluque, aliado del gobierno departamental, y Marta Peralta, en la lista del Pacto Histórico.
En lo nacional es claro el viraje hacia la izquierda, el fenómeno Petro se corroboró y una tendencia hacia la polarización de extremos, por la intervención de la masa uribista y afecta al gobierno del presidente Duque, jugados a fondo, sin hacerlo público, en la elección de la coalición del Equipo Colombia , en detrimento de las opción de centro.
Lo que se vendrá, con todo, es el afán de esos extremos de coquetear al centro político, aunque la apuesta que hacen expertos es que, sino se recompone y fortalece dicha posición de manera independiente, terminarían aproximándose más a la izquierda. Es la apuesta esta que también hace para que se junten en el Congreso de la República, en particular en el Senado, la alianza verde- Centro Esperanza y miembros electos del Partido Liberal, más otros independientes. Es evidente que la composición del Congreso exhibe la necesidad de muchas alianzas y coaliciones permanentes o coyunturales para poder asegurar la gobernabilidad.
Esperamos que todo este proceso electoral se desarrolle en medio de tranquilidad, respeto y el grado de violencia en nuestro país no se agudice. Que la acción del gobierno nacional no cese en enfrentar desafíos como la pobreza, la inflación, sobre todo de los alimentos, que afecta más a los más pobres, y que el impulso de la economía no se disminuya, que las obras de infraestructura se lleven a cabo sin pausa y que los servicios sociales se hagan más eficaces, proscribiendo la corrupción que hace escasa la confianza pública en los gobernantes. Y que garantice con neutralidad, un proceso político transparente y verdaderamente democrático.