El Consejo Superior Universitario, CSU, máximo órgano de dirección y gobierno de la Universidad Popular del Cesar, elegirá al rector 2019 – 2023. No habrá consulta estamentaria, aunque lo intentaron varias ocasiones sin éxito pero sí con muchos tropiezos.
El ministro de Educación Nacional o su delegado, quien preside el CSU, el gobernador del departamento, un miembro designado por el presidente de la República, un representante de las directivas académicas, un profesor de la institución, un egresado, un estudiante, un representante del sector productivo del Cesar, un exrector, y el rector, con voz y sin voto (que no hay), serán los encargados de escuchar a los nueve candidatos en entrevista para decidir quién será el próximo dirigente de la alma mater.
De inmediato nos surge la inquietud sobre si existen precedentes sobre apartar a los estamentos de la elección de rector para elegir de manera directa. La respuesta es no, y va acompañada de inconformidades por parte de algunos miembros de esa comunidad universitaria.
Hace cuatro años a la UPC la rondó la posibilidad de suspender la consulta pero las presiones estudiantiles y deliberaciones de las autoridades de la Universidad dieron como resultado que las elecciones tuvieran lugar.
En esta oportunidad, y con la decisión anunciada a través de acuerdo, ¿transita la UPC hacia una solución al tortuoso camino para elegir rector 2019 -2023, o será otro episodio más de lo que se ha visto hasta ahora?
El Consejo ha asegurado que su intención máxima es la defensa de la institucionalidad en la alma mater, pero entidades como la Organización Colombiana de Estudiantes y la Plataforma Unidad Estamentaria siguen insistiendo en el camino elegido no es el correcto para llegar a tales fines. EL PILÓN ha escuchado a las partes en diferentes escenarios, teniendo en cuenta el alto nivel de importancia de la Universidad para los cesarenses.
Lo que hemos hallado es que se considera que lo decidido a través del Acuerdo N°. 017 del 6 de diciembre de 2019 no satisface a la población universitaria y, por el contrario, el Consejo Superior Universitario, CSU, podría designar a un rector o rectora entre nueve candidatos, sin que esta decisión tenga aceptación entre los estamentos.
La mayor controversia parece girar en torno a que la decisión ha sido tomada haciendo una analogía…
…“dar aplicación analógica al artículo 6º del Acuerdo No. 015 del 14 de abril de 2004, proferido por el Consejo Superior de la Universidad Surcolombiana, Institución de Educación Superior”, se lee en el Acuerdo N°. 017, hecho que consideran algunos “promueve la antidemocracia”, y va en contravía de la Ley 30 de 1992, en sus apartes garantes de que haya participación democrática de la comunidad académica.
Sabemos que las reuniones son frecuentes, todas en busca de llegar a un final feliz en la Universidad. Los miembros del CSU, los estamentos, y comunidad en general parecen querer el bienestar general de la UPC pero transitando otro camino y con acompañantes distintos.
Es época de reflexión. En pleno inicio de fiestas navideñas la Universidad Popular del Cesar toma una de sus decisiones más importantes y el ambiente, pese a las diversas decisiones, sigue enrarecido, cuestionado, oscuro.