El difícil panorama político de Venezuela es ahora más confuso. Todo esto frente a las decisiones tomadas por el único grupo opositor visible en los últimos días, la Asamblea Nacional (AN), que fue la primera en desconocer la posesión de Maduro e invocó la Constitución para posesionar como presidente al diputado Guaidó, como presidente interno del país.
El éxodo que hoy tiene con incertidumbre el camino político y constitucional del vecino país ha provocado un dolor de cabeza agudo a la población venezolana que radica en la capital del Cesar. “La única fuente de legitimidad que existe en Venezuela solo lo tiene la Asamblea Nacional, la cual ya está tomando cartas en el asunto y me llena de satisfacción que está haciendo algo por el país. Nosotros los venezolanos hace mucho tiempo estábamos esperando que alguien hiciera algo, toda vez que dese el 2013 Venezuela no es un país normal porque no goza de legitimidad situación que nos tiene en esta caldera socialista”, argumentó José Noroño, abogado venezolano radicado en Valledupar.
La decisión de la AN no solo fue aplaudida por los venezolanos que conocen de este nuevo panorama sino además por el gobierno argentino, en cabeza de Mauricio Macri; el gobierno brasilero, dirigido por Jair Bolsonaro y la Organización de los Estados Americanos (OEA), que se pronunciaron reconociendo Guaidó como presidente legítimo.
“Se necesitan nuevos actores políticos, nuevas estrategias de cohesión social y el respaldo de la comunidad internacional para lograrlo, de lo contrario el fenómeno migratorio venezolano a Colombia y el mundo seguirán afectando gravemente al continente que no estaba preparado para afrontar una situación como está”, indicó Noroño, doctor en Ciencias Gerenciales con estudio postdoctoral en Integración y Desarrollo de América Latina.
LA DECISIÓN DE LA ASAMBLEA
La noticia con más relevancia en las calles del vecino país, algunas devastadas, fue la decisión de la AN informada a través de un comunicado emitido el pasado viernes 11 de enero por el Parlamento. En el cual se afirma que por medio de los artículos 333,350 y 233 de la Constitución Nacional de Venezuela se estableció un nuevo mandatario y además invitaron al pueblo venezolano y la Fuerza Armada Nacional desarrollar un proceso de elecciones libres y transparentes que faciliten una transición pacífica y democrática en el país.
Al órgano legislativo del país no le tembló la voz para un día después de la posesión de Maduro Moros anunciar que desconocería la posesión del político venezolano y que, por el contrario, establecería en el poder a Juan Guaidó, presidente del Parlamento, como el nuevo mandatario legítimo de Venezuela y solicitó a la comunidad internacional rodear la toma del mando del poder Ejecutivo que ha sido usurpado.
Luego de la decisión se desplegaron algunas marchas de apoyo a la decisión de la comunidad en las principales capitales del país, al mismo tiempo de estas en Caracas Guiadó convocó un Cabildo Abierto donde el pueblo se reunió para dar apoyo a la única voz de esperanza del país. Escenario que fue momento crucial para que el nuevo dirigente del país señalara que la lucha por la restitución del orden constitucional iniciaba.
“Esta era la decisión que esperábamos porque este es realmente según la Constitución quien es nuestro mandatario, y Maduro se mantiene en el poder gracias al apoyo de las Fuerzas Armadas porque tienen el negocio del poder. Pero más allá de eso hoy el pueblo venezolano está sufriendo mucho lo que nos lleva a salir más de nuestro territorio para lograr sobrevivir, necesitamos ayuda”, indicó José Gregorio Noroño, abogado venezolano asentado en Valledupar.
El 23 de enero fue convocada una marcha nacional con el objetivo de “presionar por un gobierno de transición” que llame a elecciones presidenciales.