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Descubriendo la naturaleza

MEDIO AMBIENTE

Por: Hernán Maestre Martínez

Valledupar, Ciudad Ecológica de Colombia. Recuperemos y conservemos las cuencas de los ríos Guatapurí y Cesar. Hagamos causa común para que el Embalse de Besotes sea una realidad, es agua para la vida en Valledupar, La Paz y San Diego. ¿Será mucho pedir?.

Recibimos vía correo electrónico un artículo escrito por Libardo  Gómez Sánchez, el cual fue publicado en el Diario de Huila, Neiva, el día 8 de noviembre del presente año, éste nos lo envió  una afectísima amiga exiliada en el exterior, también preocupada desde hace muchos años por la problemática ambiental; al considerarlo muy inclusive para las reflexiones de esta época navideña y al estar a tono con nosotros y por lo que estamos viviendo, nos permitimos reproducirlo en esta columna:

“En el año de 1875, Federico Engels escribió un bellísimo texto en el que resumía los logros de las Ciencias, especialmente las Naturales, hasta esa fecha y lo tituló  “La dialéctica de la naturaleza”, En él describe con la precisión de un relojero la forma como la historia de la naturaleza termina encontrándose con la historia del hombre, pues este es su máxima creación y con él toma conciencia de sí misma. Nos recuerda el momento en que la ciencia deslinda campos con la teología e inicia su vertiginoso camino de descubrimientos, asociados a un profundo conocimiento de las leyes que rigen a la naturaleza y que nos permite, a su vez, tomar provecho de ella, en beneficio de la solución de nuestras necesidades vitales como alimento y abrigo.
La industria, que surge como una de las realizaciones de la acumulación de capitales logra niveles de producción nunca antes imaginados y según sus palabras: “hoy un niño produce más que antes cien adultos”.
Con su prodigiosa visión, anticipa también los problemas que surgen de una sociedad que no es consciente de la producción social, en la producción y la distribución no obedecen a un plan y termina por reproducir unas situaciones en que se retrotrae al hombre a condiciones solo comparables a las que se podrían considerar como normales en el mundo animal. La miseria, que se esparce por el planeta como una de las siete plagas de Egipto, sume en realidades oprobiosas a la inmensa mayoría de las gentes.
Cuando se creía que el hombre había logrado someter a las fuerzas de la naturaleza, resulta que su explotación indiscriminada ha dado como resultado el desencadenamiento de su reacción: huracanes, inundaciones, sequías, polución, calentamiento global, etc.
El desmesurado desarrollo de algunas naciones y las relación subordinada de aquellas que permanecen en el atraso económico han generado una extraña paradoja: en los primeros se sufre porque la sobre explotación condena a los hombres a un trabajo agotador y en los segundos se soporta las privaciones propias de la carencia de trabajo o de uno pésimamente remunerado; en los países ricos la naturaleza se afecta por la generación abundante de desechos químicos, radioactivos, smock mientras en los países pobres la misma es objeto del saqueo absurdo de los recursos que ofrece y la deforestación. Dado que pertenecemos al grupo de las naciones sometidas, los riesgos ambientales que tenemos están en las minas cielo abierto, las concesiones sin límites para aprovechar recursos hídricos y forestales y la explotación indiscriminadas de otras riquezas de nuestro subsuelo.
Infortunadamente quienes nos gobiernan consienten políticas que promueven todo esto que no garantiza un futuro promisorio para nuestro pueblo.
Engels advierte sobre lo que denominó la libre concurrencia, lo que permitió la evolución de las especies en la lucha por la subsistencia, pero que convertida en libre mercado en la época contemporánea, conduce a la antropofagia entre las naciones en beneficio exclusivo del gran capital y condena a la miseria a millones de seres humanos. Cada día se hace más urgente, el cambio de modelo de sociedad, para que el conocimiento que podemos obtener de la naturaleza sirva para su preservación y la de la especie humana.
Quienes tienen la pretensión de defender la naturaleza, deberían consultar este texto, pues les ayudará a comprender que no es posible tan noble tarea, si no comenzamos por defender los derechos de los hombres y mujeres que vivimos en ella”

NOTA  BREVE:

Por favor propaguemos este escrito es de mucha utilidad para la contribución a la toma de consciencia y cambio de actitud frente al deterioro ambiental.
¿Será que podemos decir feliz navidad con tantos congéneres sufriendo semejante desastre? ¿Será que aprendemos de esta mala experiencia?.

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