En Colombia, la sociedad civil viene trabajando de manera ardua por reivindicar el derecho a una alimentación saludable y a la información. Sin embargo, la falta de respuesta oportuna del Estado, así como la indebida interferencia de la industria no ha permitido el avance de las regulaciones que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha definido como urgentes y necesarias para que países como Colombia privilegien el bien común y protejan la salud pública, en especial la de los menores de 18 años.
Es por esto, que el pasado 9 de diciembre de 2019 Red PaPaz presentó una acción popular ante el Tribunal Administrativo de Cundinamarca por la violación sistemática y reiterada de los derechos que tienen niñas, niños y adolescentes a la salud y a la información, y a no recibir publicidad engañosa.
La acción popular, que se presentó en contra del Ministerio de Salud y Protección Social, el Departamento Administrativo de la Presidencia de la República, el INVIMA, la Superintendencia de Industria y Comercio, la Comisión de Regulación de Comunicaciones, Postobón y Alpina, busca que se ordenen al Gobierno acciones inmediatas para proteger a los menores de 18 años, privilegiando el bien común sobre los intereses de la industria de productos ultraprocesados no saludables (comida chatarra). Dentro de los hechos que ameritan esta acción popular se encuentra en primera medida la falta de respuesta por parte de las autoridades competentes ante numerosas actuaciones de la sociedad civil exigiendo que no se emita publicidad engañosa especialmente de productos ultraprocesados no saludables para niñas y niños, con mensajes falsos o que dan a entender que sus productos son saludables e ideales para la población infantil.
Segundo, la denuncia que interpuso Red PaPaz ante la SIC contra Postobón y Alpina por publicidad engañosa de sus productos Hit y Fruper el 21 de diciembre de 2017 sigue sin resolverse. Tercero, la falta de acciones por parte de la Comisión de Regulación de Comunicaciones contra los canales RCN y Caracol por emitir una publicidad de HIT que había suspendido previamente el INVIMA.
Y finalmente, la omisión del Ministerio de Salud en establecer un etiquetado claro, que le permita a los consumidores saber si los productos tienen exceso de azúcar, sodio o grasas saturadas, para que la población pueda tomar decisiones alimentarias más saludables.
Esta falta de respuesta por parte Estado, sumada a la indebida interferencia de la industria de productos ultraprocesados en la política pública, sin duda han contribuido a los crecientes niveles de obesidad que se registran en el país. De acuerdo con la Encuesta Nacional de la Situación Nutricional (ENSIN) de 2010 y 2015, el exceso de peso en 5 años los incrementos fueron así:
• De 4,9% a 6,3% en niños y niñas menores de 5 años.
• 5,6% en niños y niñas de 5 a 12 años, ya son 1 de cada 4.
• 2,4% en adolescentes de 13 a 17 años, pasó de 15,5% a 17,9%.
Adicionalmente, según la Encuesta Nacional de la Situación Escolar (ENSE) de 2018, el 74% de los estudiantes consume una o más bebidas azucaradas por día y solo 1 de cada 10 consume frutas y verduras según recomendación de la OMS.
Para Carolina Piñeros, directora ejecutiva de Red PaPaz, “no puede seguir pasando el tiempo sin que el Estado asuma las políticas públicas recomendadas por los organismos internacionales que cuentan con evidencia de su eficacia para mitigar el incremento en los índices de malnutrición en niñas y niños. Estamos condenando a nuestros hijos a una vida adulta con enfermedades que son prevenibles y se está generando una carga económica para el sistema de salud que pone a Colombia en graves problemas para garantizar nuestro derecho a la salud. El nuevo ministro de Salud, el doctor Fernando Ruiz Gómez, recibe el país en este sentido en cuidados intensivos, es momento de actuar. Ministro cuente con nuestro apoyo para hacer lo que tiene que hacer”.