Hace poco el abogado Luis Colmenares publicó a través de esta casa editorial una columna de opinión titulada ‘Vuelve y juega: gasolina subsidiada en La Guajira’, en la cual expresó su pensamiento frente a la distribución de los cupos de combustible subsidiado en La Guajira y Cesar, análisis que ‘prendió’ la discusión debido a que para él el territorio cesarense no debe ser merecedor de este beneficio “porque no tiene frontera abierta con Venezuela”.
En el desarrollo de su texto, Colmenares escribió: “Los cupos de combustible subsidiado fueron creados para combatir el contrabando proveniente de Venezuela y Ecuador, por tener frontera abierta. Y en esa ocasión se tuvo en cuenta a La Guajira, Norte de Santander, Arauca y Nariño… De manera extraña, después fueron incluidos todos los municipios del departamento del Cesar, a pesar de que solo tienen frontera con Venezuela los municipios de Manaure, Codazzi y Becerril”.
Además, manifestó que el beneficio de la Ley de Frontera se logró en tiempos en los cuales el paramilitarismo dominaba las mayorías del Congreso de la República y que por las decisiones judiciales, están vigentes las mismas que en su momento se tomaron: “Es probable que el miedo al paramilitarismo fuera la excusa para toda esa permisividad legislativa”, afirmó al respecto.
Sin embargo, para conocer otra postura sobre las citadas declaraciones, EL PILÓN consultó a la Federación Nacional de Distribuidores de Combustibles y Energéticos, Fendipetróleo, seccional Cesar, desde donde se argumentó: “La Ley de Frontera no solo nació para contrarrestar el precio del combustible de contrabando, sino también con el fin de que los municipios fronterizos, desde Nariño hasta La Guajira, puedan tener unas condiciones preferenciales para generar nuevas empresas y en consecuencia, empleos para afrontar los efectos de estar en zona fronteriza”.
Desde la entidad se agregó que el Cesar ha recibido los efectos migratorios de ciudadanos y residentes venezolanos, con una cifra aproximada de 35.000 personas que hoy están en este territorio.
Sumado a ello, indicó que los cupos no se asignan de manera arbitraria, sino que la metodología, que estipula las cantidades según las necesidades de la región, viene desde el Ministerio de Minas y Energía.
No obstante, otro de los puntos que resaltó Luis Colmenares fue el relacionado con las empresas prestadoras del servicio: “Una Estación de Servicio, o EDS, en La Guajira puede tener un cupo de 10 mil galones por mes, pero esa misma EDS en el departamento del Cesar tiene un cupo de 80 mil galones por mes”.
Ante ello, Fendipetróleo Cesar aseveró que no se trata de una situación preferencial en comparación con La Guajira. “El cupo lo determina una fórmula que tiene en cuenta el número de ventas y la antigüedad de la estación. Por ello, una estación nueva no puede tener lo mismo que una que opera desde hace 40 años”, dijo Lily Mendoza, directora de la federación en la región.
En el caso de la capital del Cesar, hoy cuenta con 31 estaciones de servicios y en la última resolución tuvo un incremento del 23% que “sigue siendo insuficiente para lo que requiere la ciudadanía, mientras que Maicao tiene 86, siendo más pequeña que Valledupar”, puntualizó Mendoza. Finalmente, la prensa reportó que el Ministerio de Minas y Energía aprobó un incremento del 92% para el cupo subsidiado de La Guajira, pasando de 2.5 millones de galones en el 2021 a 4.8 millones en el 2022.
POR ANDREA GUERRA PEÑA
@andreaguerraperiodista