Juan Guillermo Cuadrado fue uno de los protagonistas del triunfo de la Juventus de Italia, que superó este martes 3-0 al Barcelona en el juego de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones de Europa.
El extremo colombiano demostró su fortaleza en ataque y le sumó el sacrificio defensivo que ayudó a controlar a Neymar, una de las figuras de los catalanes.
Abierto por el costado derecho, haciendo gambetas, amagues y desequilibrando, Cuadrado empezó a perfilar la victoria de la ‘vecchia signora’. Apenas a los 7 minutos, el nacido en Necoclí cayó por su sector, encaró a Jeremy Mathieu, y esperó a que llegará su amigo Paulo Dybala para que el argentino definiera de gran manera y abrir el marcador.
La propuesta del técnico Massimiliano Allegri no fue la de salir desbocado al ataque. El DT prefirió entregarle la pelota al rival, replegarse en defensa y tratar de hacerle daño con salidas rápidas por los costados.
Y Juan Guillermo respondió en ambas tareas: respaldó al lateral derecho Dani Alves, ayudándole a controlar al astro brasileño Neymar y a cualquier jugador que atacara por ese sector. Pero también tuvo descolgadas que hicieron daño y llevaron peligro al arco de Marc Ter Stegen, sin buscar la finta y la jugada individual, y pensar más en cómo llegaban sus compañeros desde atrás.
A sus 28 años, Cuadrado fue inteligente en cada jugada, no propuso duelos individuales para no perder la pelota, si no que hizo la pausa en los momentos que se necesitaban para ubicar a Higuaín, Dybala o Pjanic.
En una de sus posturas defensivas, se llevó una fuerte entrada de su compañero Giorgio Chiellini, que por fortuna no fue grave. Sin embargo, a los 73 minutos salió por Mario Lemina para proteger la amarilla que traía a cuestas y así poder estar en el juego de vuelta.
Juan Guillermo Cuadrado cumplió con su tarea y saborea un triunfo histórico, en el que tuvo mucha responsabilidad gracias a su inteligencia y sacrificio.
Futbolred