En cuándo a la fuente de financiación, se me ocurre que sería el fondo nacional de regalías a través del OCAD regional, desde donde se han venido financiando muchos proyectos importantes para el departamento como la Universidad Nacional, el Estadio de Fútbol, el Hospital de Aguachica, el Parque de las Flores y otros que sin demeritar su importancia, no son más importantes que el embalse los Besotes el que nos garantizaría agua potable para los municipios de Valledupar, La Paz, San Diego y probablemente Bosconia en los próximos 50 o más años y además garantiza la conservación de las cuencas altas y baja del río Guatapurí protegiéndolo de los embates reales e inevitables que se están generando por el fenómeno del cambio climático.
Para un proyecto de esta magnitud es imperativo que el gobierno Departamental y el Municipal, se sienten a dialogar y hablen el mismo lenguaje. Todavía hay tiempo suficiente para dejar este proyecto caminando y que Luis Alberto Monsalvo y Fredys Socarrás logren pasar a la historia como los iniciadores de tan necesaria obra.
En cuanto a la operación y el manejo del proyecto, mi propuesta se orienta a que se conforme una empresa de economía mixta (Empresa de Recursos Hídricos de Valledupar) en la cual deben estar obligatoriamente cómo socios la gobernación del Cesar, el municipio de Valledupar y Emdupar además de los inversionistas privados que quieran hacer parte de esta empresa. Esta empresa se encargaría de la operación, el manteniendo del embalse y la comercialización del agua en bloque a los potenciales clientes como los municipios de Valledupar La Paz y San Diego y los excedentes a los agricultores que así lo demanden.
Esta empresa además tendrá la responsabilidad de conservar la cuenca que le abastece de la materia prima: el agua!, adquirir terrenos para la conservación de la cuenca, proyectos de reforestación, regeneración de los bosques, campañas educativas fundamentales para evitar la deforestación y quema de bosques, además evitar la caza y pesca de especies endémicas o en vía de extinción.
No esperemos a que pase lo que en Santa Marta, el río Manzanares se secó, no tiene agua potable para consumir, solo les queda el recurso de traer desde la desembocadura del Río Magdalena en Barranquilla, con tubería el agua hasta la bocatoma del acueducto de Santa Marta, por eso impulsamos esta cruzada por la Represa de los Besotes, para que las fuerzas vivas sociales nos levantemos y exijamos a las autoridades políticas y gremiales se unan para al fin dejar realizada nuestra única y real esperanza de agua potable la Represa de los Besotes.
Por Gonzalo Arzuza