La inseguridad que actualmente afrontan los planteles educativos de Valledupar, en especial los que están ubicados en los sectores apartados, ya tocó fondo y la reacción de los profesores, directivos docentes, estudiantes y padres de familias no se hizo esperar, luego que delincuentes atracaron a una docente en el salón de clases, despojándola de sus pertenencias de valor, bajo la mirada impotente de los alumnos.
El insólito caso se registró en el interior de la Institución Educativa Joaquín Ochoa Maestre, localizado en el barrio Mareigua, en donde días pasados se hurtaron todos los computadores con sus respectivas CPU y demás accesorios, pese a la vigilancia del celador asignado para ese plantel educativo.
Ante el acoso de los delincuentes a la Institución Educativa, ayer se precipitó una asamblea general con los profesores, la Policía del Cuadrante, padres de familias, directivos de Aducesar y representantes de los estudiantes, allí se establecieron algunas medidas conducentes a reprimir este delito que los mantiene preocupados, debido a la poca seguridad brindada por la fuerza pública.
Durante el encuentro, hubo decisiones encontradas, para lograr la seguridad en el sector, por cuanto algunos querían entrar en cese de actividades indefinidas, hasta tanto se garantizara la seguridad e integridad física de profesores, estudiantes y padres de familia. Otras personas por el contrario rechazaron esa propuestas, debido a que no era la más fácil y adecuada para darle solución a tales hechos.
Sin embargo, acordaron en solicitarle al Alcalde, Fredys Socarrás, para que interceda ante el comandante de la Policía Cesar, coronel, Juan Pablo Guerrero, para que mantenga la vigilancia policial en los colegios que mayor inseguridad registra en horarios especiales, en busca de tranquilidad de todos, por cuanto los profesores coincidieron en afirmar que en tales circunstancias, las clases las dictan en medio de la zozobra y el miedo, porque en cualquier momento ingresan los delincuentes y los atracan.
Puntos de vista
Belia Orozco Marriaga, Rectora. La situación de inseguridad es difícil. Necesitamos el apoyo de los padres de familias, de toda la comunidad y de la fuerza pública, para combatir a los generadores de violencia y de esa manera garantizar la educación de los estudiantes.
Diva Guzmán Díaz, Madre de familia. Ayer los estudiantes protestaron frente al colegio para exigir mayores garantías de seguridad, porque a cada momento los están atracando en los alrededores del colegio.
Teresa Toro, Madre de familia. Nosotros también tenemos que velar por la seguridad de nuestros hijos y de los profesores. No es justo que en el mismo colegio se metan a atracar a los profesores.