Por: Luis Elquis Diaz
A partir del 9 de junio empezará a rodar el balón en Suráfrica.
El Mundial de Fútbol por primera vez tendrá como escenario al Continente Africano. Ésta será la edición número 19 de las copas del mundo.
La historia empezó a escribirse en Sur América en 1930, cuando los uruguayos actuaron como anfitriones. Entre 1939 y 1945 hubo una breve interrupción debido al conflicto desencadenado por la invasión Nazi a Polonia, originando la Segunda Guerra Mundial. Luego del bombardeo atómico, lanzado el seis, y nueve de agosto de 1945 sobre las ciudades de Hiroshima y Nagasaki, empezó el periodo de Postguerra. El fútbol en este tiempo resistió para que los atletas continuaran su gesta, para convertir este deporte en el rey de las multitudes, del fanatismo y gran generador de negocios.
El Mundial de Fútbol tiene una audiencia acumulada de tres mil millones de personas. Para Suráfrica, se estima que la FIFA recibirá de sus socios y patrocinadores, Adidas, Coca Cola, Budweiser, Continental, Emirates, Hyundai, Sony, Visa, Telkom, Neoafrica, Yingli Solar y Mac Donald´s, cerca de 900 millones de dólares. Los países clasificados generan internamente en sus economías un crecimiento en los negocios dada la expectativa del Mundial; así mismo en los países no clasificados. Estas son las razones que justifican los salarios de los mejores jugadores del mundo: Messi, Cristiano Ronaldo, Kaká, Tévez, Lampard. Ahora hablemos un poco de la historia de los mundiales. Aquí se puede aplicar la frase: “son muchos los clasificados a través de la historia, pero sólo siete los campeones”. Este listado es encabezado por el pentacampeón Brazil, con títulos en el 58, 62, 70, 94 y en 2002. Los cariocas son exponentes del Juego Bonito, han tenido y poseen a los mejores jugadores del planeta: Pelé, Edson Arantes do Nascimento, quizás el más grande, por todo lo que ganó y por su comportamiento dentro y fuera del terreno de juego. Brazil tiene en sus vitrinas la copa Jules Rimet por ser los primeros en conquistarla en tres ocasiones. Rompieron la constante ganando un título en Europa en 1958, lo lograron derrotando en la final a los suecos que actuaron como locales. Es el único país que ha participado en todas las citas mundialistas. Continuar narrando su rico historial futbolístico no puedo por razones de espacio.
Después, en este orden, siguen los alemanes y los italianos, con cuatro y tres títulos, respectivamente. Los Teutones, en Suiza 54 ganan su primer trofeo frente a Hungría, equipo denominado como “La Maquina Húngara”; el segundo fue como locales en 1974, en este mundial eligieron a Joao Havelange como presidente de la FIFA y se estrenó el trofeo Copa Mundial. En Italia 90 consiguieron el tercer título, y en 2006, nuevamente como locales y venciendo a Italia, consiguen el cuarto título.
La escuadra azzurra conquistó su primer título en 1934 oficiando como local; tuvieron a Benito Mussolini como hincha oficial y representante de un poder importante, a propósito expresó: “Ay de ustedes si no ganan el Mundial, pero que Dios los ayude si llegan a fracasar”. En Francia 1938 repiten con menos presión política y en medio del sonido de trompetas que alertaban belicosidad. En España 82 lograron la tripleta de la mano del resucitado goleador Paolo Rossi.
Con dos campeonatos del mundo continúan los vecinos del Río de la Plata. Los Uruguayos organizaron la primera cita mundialista en 1930 y se alzaron con el título. El segundo en 1950, en la final contra Brasil; la derrota de los cariocas generó delirio y llanto colectivo e institucionalizó el Maracanazo para el mundo del fútbol; es quizás la fecha para olvidar de los cariocas.
En 1978, Argentina organizó el mundial que término conquistando frente a Holanda, la naranja mecánica de Johan Cruyff, aunque antecedido por el escándalo que produjo la victoria sobre el Perú por seis a cero, dejando por fuera de la final a Brasil; aún se especula sobre el profesionalismo de los peruanos. En México 86 no hubo especulaciones, pues los gauchos ganaron su segundo título con autoridad de la mano del más grande: Diego Armando Maradona. Para el recuerdo está el registro del gol más bello de los mundiales y el polémico gol con la mano de Dios, ambos a Inglaterra, país con el cual sostuvieron un conflicto por el archipiélago de las Malvinas en 1982.
Con un título respectivamente, cierran el ramillete los ingleses, inventores del fútbol, y los franceses, ambos como anfitriones en 1966 y 1998.
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