Con la terminación de la vida útil de las tuberías de gres en el barrio Mareigua, en el sur de Valledupar, empezaron los problemas de los malos olores provocados por los taponamientos y obstrucciones en las alcantarillas. Principalmente, en épocas de lluvia aguas negras inundaban las calles. Ante las protestas y reclamaciones para la renovación del alcantarillado, la alcaldía municipal decidió iniciar la reposición de las redes húmedas del sector.
La tubería de gres tiene un tiempo de vida útil de cerca de 20 años. En la mayoría de barrios de Valledupar ya cumplieron su ciclo. Aunque en algunos no se han presentado problemas, en Mareigua los daños en las tuberías que se encargan de transportan las aguas residuales sufrían taponamientos y obstrucciones por el desgaste de los años. Estas aguas negras se convertían en un problema de salubridad por ser potenciales generadoras de enfermedades y alergias como la hepatitis y la diarrea.
El tiempo de ejecución de la obra que se inició el pasado mes de agosto será de dos meses, por lo que se tiene planeado tener terminados los 490 metros de tubería de gres que pasarán a pvc a finales del mes de octubre.
De la calle 57 a la calle 60 se hará la reposición de tuberías que cubre un total de 1887 metros de longitud. “A la nueva red se conectarán cerca de 480 casa, que representan unas 2.900 personas beneficiadas”, aseguró la ingeniera Jenny Castro, supervisora de apoyo de la obra.
El consorcio Redes del Sur es el encargado de ejecutar las reposiciones que tienen un valor de $934 millones, sumados a los $64 millones que se pagarán por interventoría. “Nuestro objetivo es reponer la mayor parte de la tubería de gres que ya cumplió su tiempo” comentó el gerente de Emdupar, José María Gutiérrez Baute.
Además, se generaron cerca de 35 empleos directos. Por su lado, la supervisora encargada aseguró que con la renovación se abre la posibilidad de pavimentar las calles.