A las 9:00 de la mañana de ayer, madres comunitarias y menores del Centro de Desarrollo Infantil, CDI, del corregimiento de Atánquez, salieron por las calles de la población a protestar por el hecho en el que un menor integrante de esta comunidad resultó maltratado, al parecer, con objeto cortopunzante, que lo tiene en delicado estado de salud en un hospital de Valledupar.
Aunque los niños poco entendían sobre la situación, elevaban sus tiernas voces en contra del maltrato infantil del que por infortuna padeció uno de sus compañeros de la sede del corregimiento de La Mina.
La comunidad se pronunció también por medio de carteles que fueron alusivos al menor de 4 años de la etnia Wiwa.
“Denuncien, denuncien, no callen”, decían de manera constante las madres comunitarias a la población.
La directora del CDI, Lesvia Amparo Martínez Arias, aseguró que los menores deben ser respetados y por tanto se deben proteger sus derechos. Así pues, indicó que la comunidad institucional rechaza ese acto violento, que significa afectación a la integridad de los menores.
Por su parte, Carlos Alberto Maestre Corzo, miembro del colectivo de comunicaciones del pueblo Kankuamo, aseguró que hasta las 11:00 de la mañana se llevó a cabo esta actividad, donde participaron alrededor de 50 padres de familia y docentes que gritaron “No al maltrato infantil”.
Por Merlin Duarte García/EL PILÓN
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