Con el objetivo de apuntar a una comunidad sostenible la población de Moloconosir, en el departamento de La Guajira, inauguró con el apoyo de Cerrejón, un centro de transformación y comercialización de productos lácteos. En esta infraestructura, la leche es la principal materia prima y allí se fabricarán y se tendrán a la venta diferentes tipos de quesos: mozarella, picante, finas hierbas y costeño, entre otros.
“Estamos inaugurando un sueño. Me acuerdo que, cuando vino el Papa a Colombia dijo: ‘Sueñen en grande. Vuelen alto’. Eso hicimos en la comunidad de Moloconosir, soñar, soñar en grande. Empezamos a trabajar por Ganadería Chinay. En este camino nos hemos encontrado ángeles que para nosotros son aliados, una empresa con mucho sentido de pertenencia que ha ayudado el desarrollo social de La Guajira y le ha apostado al pueblo wayuu, Carbones del Cerrejón”, afirmó Josefa Robles, representante legal de la Ganadería Chinay SAS, operador-asesor de los proyectos.
Moloconosir ya es propietaria de la Ganadería Chinay, encargada de proveer carne ovino- caprina, bovina, porcícola, avícola y productos de transformación de la leche. Con la inauguración dará un nuevo paso para mejorar la calidad de la producción de su portafolio de productos.
Con Moloconosir, Cerrejón ha venido trabajando en el marco de la sentencia T-704 de 2016 varios proyectos elegidos de manera autónoma por la comunidad. Por un lado, la compra de animales bovinos, que consistió en la entrega de dos toros reproductores y 45 vacas, con el propósito de mejorar el hato ganadero de la comunidad. También se ha incluido el mejoramiento de la sala de ordeño y las obras para mejorar la accesibilidad entre los cinco asentamientos de la comunidad, proyectos que aún están en ejecución. Y, finalmente, la construcción de un punto de comercialización, que es la infraestructura donde está ubicado el centro de transformación y comercialización inaugurado en días anteriores.
“Moloconosir es un claro ejemplo de cómo las iniciativas ejecutadas en el marco de la sentencia pueden ser sostenibles en el tiempo y traer desarrollo y progreso a una comunidad. Estuve acompañándolos en la inauguración del centro y me alegró en gran manera ser testigo de este sueño cumplido, ver la felicidad de su gente, probar sus productos y, por encima de todo, ver cómo complementaron entre sí sus proyectos para el crecimiento de toda una comunidad. Es una iniciativa que no tiene comparación. ¡Felicidades a Moloconosir!, sé que empezarán a ser referencia para otras comunidades”, concluyó Janneth Daza, gerente de Diálogo Social de Cerrejón.
La sentencia T-704 de la Corte Constitucional estableció que Cerrejón debía llevar a cabo un plan inmediato de mitigación para las comunidades del área de influencia y consultar con ellas las compensaciones que fueran necesarias. A la fecha, Cerrejón y las comunidades indígenas cercanas a su línea férrea han protocolizado 337 acuerdos, de los cuales 254 han sido cumplidos y cerrados con el acompañamiento del Ministerio del Interior. Los acuerdos protocolizados contemplan la ejecución estimada de 2.117 proyectos definidos de manera autónoma por las comunidades y han venido siendo ejecutados por ellos mismos.
POR REDACCIÓN/EL PILÓN