Con el fin de ilustrar a lectores y audiencia sobre las perspectivas del proceso en marcha, citamos apartes de El Tiempo (21 octubre) con el embajador de los Países Bajos (Holanda) Ernest Noorman.
Responde a la declaración del presidente Iván Duque de que recibió un proceso frágil: “Durante las negociaciones en Afganistán (Ernest fue diplomático en ese país), que desafortunadamente, como vimos, fueron un fracaso, Colombia jugó un papel muy importante como un ejemplo fuerte y positivo de cómo llegar a un acuerdo de paz, de cómo incluir a las víctimas en un acuerdo.
A nivel internacional este acuerdo es un éxito. Naturalmente, un proceso de paz es, en mi opinión, después de 50 años de guerra, un proceso difícil porque si fuera fácil no habría habido una guerra de tantos años.
Trabajamos junto con la comunidad internacional y todas las partes involucradas para continuar este proceso y en mi opinión el balance es positivo. Naturalmente hay dificultades, es lógico.
En Holanda se inauguró hace poco un monumento por las víctimas de la Segunda Guerra Mundial, que ocurrió hace 75 años. El monumento tiene 102.000 piedras, y cada una tiene el nombre de una víctima… 75 años después. Y entonces, hace cinco años, firmaron el acuerdo de paz en Colombia. Es muy poco. Lo ha entendido también Irlanda del Norte. En los primeros años allí pasó muy poco. Aquí hay pasos, hay resultados concretos, como la JEP, que está investigando 20.000 secuestros.
Y lo más visible es lo de las Farc, con 13.000 excombatientes que se han desmovilizado. Es un resultado que no se ha dado en otras partes del mundo. Es único. Y también el hecho de que las Farc es ahora un partido político.
Pero la situación exige atención cada día. Tenemos que trabajar y continuar con la lucha para asegurar que todo el país esté incluido, porque naturalmente hay partes que son frágiles, dónde hay ausencia del Estado y es importante que haya presencia para dar servicios y seguridad a la población. Esa es la opinión de mi país”.
Al preguntársele que para Holanda el proceso es un éxito pero hablamos casi a diario de asesinatos, de ataques, como si fuera una prueba de que el proceso no avanza, responde que lo importante es la película, no la foto:
“Yo estoy de acuerdo… sobre la situación debo recordar una expresión: ‘No hay que juzgar la foto sino la película’. Cuando ves hoy la foto de la paz, puede ser pésima, pero cuando ves la película desde fines de los años 80, la situación ha mejorado enormemente”.
Luego se le pregunta si avanza lo suficiente la justicia transicional en Colombia -ya que Holanda sabe bien de los procesos de crímenes de guerra toda vez que La Haya (Holanda) es sede de la Corte Penal Internacional, CPI: “Si comparamos esos procesos con el proceso de la JEP, aquí son rápidos. Entonces las críticas de que no hay acción suficientemente rápida es muy relativa. Un proceso legal toma tiempo, hay que hacerlo cumplir. Y lo hacen. Eso es lo increíble, lo que hace la Comisión de la Verdad y lo fundamental de lo que va a pasar ahora después de la publicación del informe”.
A manera de conclusión dice: “Después de 50 años de guerra no se pasa la página, hay que leerla”.