En la sociedad actual, donde la información es clave, los datos juegan un papel fundamental en la toma de decisiones tanto en el ámbito privado como en el público. Bien lo dijo la revista The Economist en el 2017 en su carátula título “El recurso más valioso del mundo ya no es el petróleo, sino los datos”. Las encuestas de percepción se han convertido en una herramienta invaluable para los gobiernos y las empresas privadas, ya que les permiten conocer de primera mano las necesidades y preocupaciones de la ciudadanía.
En el caso de Valledupar, los datos revelados en la encuesta de ‘Valledupar, Cómo Vamos’ demuestran una realidad preocupante en cuanto a salud y empleo y la percepción sobre el rumbo de la ciudad. El alto porcentaje de personas que consideran difícil encontrar empleo, esto refleja la situación de informalidad y rebusque que aún prevalece en la región, a pesar de la disminución del desempleo durante el 2023.
Por otro lado, la percepción sobre el rumbo de Valledupar muestra un pesimismo relativo entre los habitantes, en la encuesta también se percibe que las cosas no van por buen camino. Sin embargo, resulta interesante notar que, a pesar de este pesimismo, la mayoría de los vallenatos se sienten satisfechos con Valledupar como lugar para vivir, lo que sugiere que, a pesar de los problemas, la ciudad sigue siendo un lugar apreciado por sus habitantes.
En cuanto al orden público, los datos muestran una cierta contradicción entre lo que se percibe en redes sociales y la realidad de los barrios. Aunque existe un porcentaje considerable de personas que consideran su barrio inseguro, más de la mitad de la población no se siente insegura en sus entornos. Este dato es relevante, ya que muestra que la inseguridad puede estar influenciada por factores externos, como la voz a voz, los sitios de información y las redes sociales.
Los ‘Cómo vamos’ están para fomentar prácticas gubernamentales y de gobernanza colaborativa que respondan a las necesidades de la comunidad, tanto en entornos urbanos como rurales. Su enfoque en el seguimiento de los planes de desarrollo junto con la gestión de ejercicios prospectivos y la promoción de diálogos intersectoriales, sirven para el desarrollo sostenible de las comunidades.
El resurgimiento de VCV llega en un momento oportuno, los datos son una herramienta invaluable para entender la realidad de una sociedad y tomar decisiones informadas. En el caso de Valledupar son fundamentales para identificar las necesidades y preocupaciones de la ciudadanía, y deben ser utilizadas de manera efectiva por los gobiernos y las empresas privadas para generar mejoras concretas en la calidad de vida de los habitantes de Valledupar.
Alfredo Jones Sánchez – @alfredojonesan