Pese a tener a menos de 20 metros un Centro de Atención Inmediata, CAI, de la Policía, los comerciantes del balneario Hurtado en el río Guatapurí aseguran que están a merced de la delincuencia.
Los dueños de lo ajeno ayer violentaron las puertas de tres locales y en algunos negocios intentaron irrumpir por el techo, aumentando el temor por la inseguridad en este sector turístico de Valledupar.
Sin embargo, los delincuentes solo lograron ingresar a un local, los otros dos estaban asegurados con rejillas porque ya habían sido víctimas de hurtos en más de cuatro ocasiones.
‘Donde José’, fue el más perjudicado, puesto que fue hurtado un computador, la planta de sonido y varias canastas de cervezas, según informó la administradora del local, Luz Mary Rodríguez, que avaluó las pérdidas en un millón 500 mil pesos, dinero que alcanza a recibir entre uno y dos semanas de trabajo.
“La comida la dejaron y muchos otras cosas, sólo estaban pensando en beber y escuchar música. Mis pérdidas no fueron tan grandes porque ya había puesto un protector”, dijo Ildebrando Escorcia, administrador de local ‘Para que no me olvide’, también afectado.
Los comerciantes del balneario aseguran que ya están acostumbrados a los robos y exigen mayor presencia de la Policía. EL PILÓN constató ayer que no habían uniformados por el sitio y que ante cualquier emergencia en el CAI del sector solo había un policía a cargo.
Por Merlin Duarte García/EL PILÓN
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