Las instituciones educativas del municipio de Manaure Balcón del Cesar se sumaron a la jornada ‘La Escuela Abraza la Verdad’, este viernes 12 de agosto, una iniciativa de las organizaciones de la sociedad civil en alianza con la Comisión de la Verdad para abrir un camino de diálogo y reflexión sobre el valor de la verdad en la convivencia y la historia del conflicto armado colombiano.
La Escuela Normal Superior María Inmaculada, la institución educativa Concentración de Desarrollo Rural y la I.E. San Antonio pertenecieron a las más de 4.300 instituciones privadas y públicas del país que se inscribieron de manera voluntaria para participar de esta jornada nacional.
Nelsy Campo Torres, profesora de la Normal Superior María Inmaculada, manifestó que en las actividades desarrolladas en el municipio se organizó una caminata con siete estaciones en cada uno de los barrios más afectados por la violencia en esta zona del departamento.
Posteriormente, se realizó un acto simbólico en las instalaciones de la Escuela Normal Superior María Inmaculada, que contó con el acompañamiento de la Comisión de la Verdad en el Cesar, Educapaz y algunos representantes de la sociedad civil del municipio.
La jornada que se desarrolló en todo el país busca generar en los jóvenes una comprensión sobre las causas y persistencias del conflicto armado, una interpelación sobre el Informe Final y el legado que la Comisión dejó a la sociedad.
“La Comisión de la Verdad quiere poner en mano de los jóvenes y estudiantes de Colombia el futuro del país que quisimos formular en el Informe Final. Hemos preparado una serie de materiales pedagógicos para que en las aulas de clase se apropien de esa parte de la historia del conflicto armado que forma parte de nuestra identidad”, explicó el presidente de la Comisión de la Verdad, Francisco de Roux.
La realización de la jornada no fue obligatoria y los colegios, escuelas y centros educativos decidieron sumarse o no a esta iniciativa.
“Se trata de propiciar la comprensión del valor de la verdad para la solución de los conflictos, incluso los conflictos cotidianos. También se busca que los estudiantes se sensibilicen con la realidad de las y los sobrevivientes de la guerra que han perdido a sus seres amados, su identidad, su lugar de origen y sus ilusiones, y que acepten que ningún hecho de barbarie es justificable ni se puede repetir”, acotó Óscar Sánchez, director de Educapaz.
REDACCIÓN / EL PILÓN