Por Jairo Franco Salas
La Cohesión Social debe entenderse como una real y auténtica propuesta que favorezca el diálogo colectivo desde diversas perspectivas y disciplinas; propiciando un escenario de reflexión enfocado a conocer los conflictos, visibilizar las contiendas sociales y finalmente adoptar medidas que faciliten razonablemente, también aplicar herramientas y mecanismos que conlleven a la resolución de problemas. Esta estrategia, apuesta a proclamar programas inspiradores que generen resultados positivos, que envíen resultados de imparcialidad y garantías, toda vez que el país demanda de soluciones a problemas vitales, prioritarios y muy graves.
El propósito de este referido planteamiento expone la intención de reconocer a través de una elevada dosis de imparcialidad la historias de guerras y de vida que vive Colombia desde hace varios lustros entorno a la confrontación bélica yguerrerista entre el gobierno nacional y los grupos al margen de la Ley; sumado a ello otros factores violentos y desde luego acontecimientos absurdos e incongruentes propios de la gestión político – administrativa que se cristalizan en casos de corrupción, desigualdad social, desempleo, pobreza extrema, maltrato familiar – infantil, entre otros. Todo este proceso aquí ilustrado hace imprescindible la implementación de nuevos mecanismos alternos de soluciones en conflictos variables, que involucran componentes de capacitación y formación al ser humano como eje de desarrollo estratégico hacia un profundo y sólido crecimiento social.
Por desgracia hay ciudadanos que reflejan en sus sombríos y afligidos rostros la intimidación que desarma cualquier intención de crítica por razones encaminadas a exigir el cumplimiento de los derechos consagrados según la Constitución y la Ley. Se requiere transformación radical, liderazgo que cambien mentes y emociones, que amplíen visiones.
También es indispensable hacer una apuesta por más futuro y esperanza, incorporando medidas que busquen mejoras para hacer mayor imagen positiva con funciones enfocadas en crear condiciones de prosperidad recurrente, trabajo participativo y eficaz dirigido a continuar gestando iniciativas con espíritu democrático que fortalezca el camino de la ciudad con profundo estirpe y brillante porvenir; retomar y levantar banderas para labrar el sendero, propio de un proceso de reconstrucción moral y de configuración de espacios hacia la región en particular y la nación en general. De idéntica manera de robustecer la colectividad a través de la unión de lucha contra factores amenazantes que permitan el florecimiento de una ciudad, región y país con inclusión, coherencia, equidad y cohesión social.
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