Hace seis años estoy hablando de Clemencia Tariffa, un grupo de amigos me invitaron a sentirla, a pensarla, a descubrirla en sus letras e inspiración, a leerla y aprender de ella.
Desde el año 2018 se convirtió en la identidad de un pueblo y en el sentir de una fundación que plantó árboles azules en la capital blanca de Colombia.
Clemencia Tariffa no es solo un festival, no es solo un encuentro de poetas que vienen a descargar su esencia y a compartir con otros poetas los atributos y el sentimiento de un pueblo, de una región, de un país; entre países, entre regiones, entre pueblos y en esos remansos de vida y naturaleza de una serranía plena que llena de pureza las entrañas de cada poeta.
Clemencia Tariffa, no es solo una mujer que destilaba poesía que un día simplemente anunció: “Se viven cosas raras cuando se es poeta. Se es una flor en la que se ha derramado hiel, y se tiene la convicción que un día no muy lejano saldrán alas, que volarán como pájaros marinos para guardar así todo el aire en las manos. Se es niña, se es mujer, se es una flor, una paloma o simplemente, se es poeta”.
Clemencia Tariffa es más que todo eso, es la confianza que lo hecho y dicho hasta hoy con este grupo de profesionales se pretende convertir a Codazzi en el epicentro cultural del Cesar y busca escenarios para ser de la región y del país. En eso se trabaja.
Se edifica la identidad cultural de un pueblo, y se busca la forma de generar pensamientos diferentes a la violencia; que busca, con la poesía, darse una oportunidad y mostrar una cara de amor y perdón en un pueblo que perdía la fe.
Desde este escenario, el mejor, el de la cultura, se le toca la puerta de la confianza y la credibilidad a un alcalde, Omar Benjumea, que se muestra abierto a seguir sembrando esa semilla de esperanza, cambiar la guerra y la violencia por poesía y amor.
Es poder agradecerle a una mujer de trabajo, María Fernanda Sánchez, que se ha convertido en una gestora social de primera, que vela de manera incansable por la cultura de este municipio. Hay que reconocer el trabajo de quien trabaja.
Es posible que sea reiterativo en mis notas con este tema, pero busco serlo. No es malo hablar de lo bueno, cuando nos saturan de cosas tristes, de cosas dañinas: guerra, violencia, feminicidio, asaltos, drogas, prostitución, de eso sí que estamos saturados.
Este mes de mayo de 2023, desde el 18 hasta el 21, Codazzi se viste de poesía en un homenaje especial a Milba Orozco y Arnoldo Pineda será el escenario perfecto para desarrollar el VI Festival Internacional de Poesía y Encuentro Nacional de Declamadores Clemencia Tariffa, donde se darán cita al encuentro, poetas de varios países y de una vasta región del país.
Una voz de apoyo, de auxilio para cumplir con el compromiso; al alcalde de Codazzi, Omar Benjumea; al Ministerio de Cultura y al dinámico secretario de cultura y turismo del Cesar, Iván Murgas, Codazzi los necesita.
Gracias a Nidio Quiroz, a Maira Muñoz y a todos los miembros, trabajadores incansables, de la fundación Árboles Azules. De mi parte mil gracias por esa invitación de honor que me hacen, allí estaremos, comprometidos como el primero. Sólo Eso.
Por Eduardo Santos Ortega Vergara