Para unos es simplemente una utopía, para otros es algo que se está motivando en varios escenarios políticos del departamento. Unos empezaron a “empapelar” la idea y otros muy cercanos a Cielo Gnecco de Monsalvo sostienen que en política es como en medicina: “uno más uno no es igual a dos”.
Es una idea que ha empezado a circular desde que se reunieron allegados a la “Casa Cielo” con los congresistas, alcaldes, concejales, diputados y hasta contrarios.
Para unos la idea podría ser el resultado de diálogos de los lobos, los apes, los chichís, los Gnecco, los Salazar, los imeldas, los Cruz, los sureños, los norteños, porque ellos no tienen candidato para ganar las próximas elecciones a la gobernación del Cesar. Todos los anteriores tienen partido político de “bodega”, de los 23 partidos registrados legalmente en Colombia.
Entonces, la idea no es tan descabellada que hasta “los Comunes”, el Partido más paupérrimo (en votos, claro) y el Pacto Histórico que está de tumbos en tumbos en el Cesar, apoyarían la idea que está sonando, hasta por los corrillos de los aposentos.
Un pajarito también lo ha cantado, que a Cielo Gnecco le suena le suena y sería lograr lo que ninguna mujer ha logrado en el Cesar: ser gobernadora en una elección popular, porque hay en juego 869 mil votos, según el censo electoral. Ellos aspiran a 600 mil votos.
Pero, surge la inquietud ¿por qué Cielo Gnecco?, si tiene con su hijo Luis Alberto Monsalvo un paso bastante complicado con la justicia colombiana que lo investiga y juzga, acusado de malversación de recursos del Estado. Además, hay otros procesos que esperan su continuidad y en estos momentos tiene medida domiciliaria.
La razón de una fuente es que la candidata debe ser Cielo porque recoge el querer cesarense, porque a pesar de que su hijo está en la picota pública a la espera de una condena o una absolución, ha irrigado obras en cada rincón del Cesar. Al final, aspiran a que Luis Alberto Monsalvo logre demostrar su inocencia.
Sorprende cuando citan cifras descomunales invertidas en salud, educación, vías y establecimientos culturales.
Pero, también es prioritario que sea una mujer la candidata, para enfrentar a las adversarias que en “voz baja” están listas para aspirar a la gobernación. Entre ellas: Claudia Margarita Zuleta, Diana Molina Carvajal, Katia Ospino Salem, Alexandra Pineda y Elvia Milena Sanjuán.
La diferencia es que ninguna de las anteriores ha definido nada y solo suenan en el sonajero y hacen campañas tímidamente.
En fin, la “Casa Cielo” tiene unidad monolítica: todos los congresistas están a su lado y se descarta –por el momento- alguna traición, porque hay un pacto político inquebrantable.
Lo otro cierto es que se habla que ya están listos los candidatos a las 25 alcaldías respaldando al candidato que escoja dicha Casa, que sería Cielo Gnecco. Igual sucede –milimétricamente- con cada uno de los candidatos a los concejos municipales y a la Asamblea departamental.
Es decir, se habla que ya están seguros a votar con la “Casa Cielo” el 95 por ciento de los candidatos a alcaldías, asamblea y concejos de los distintos municipios del Cesar.
Pero, lo anterior no es todo. Entre voces y murmullos ya se sabe que el 97 por ciento de los alcaldes en ejercicio ya están respaldando a la Casa Cielo y lo mismo acontece en la Asamblea y los concejos de los municipios.
Con este escenario así, un conocido expolítico me dijo: “Cielo Gnecco será la nueva gobernadora del Cesar”. Llamé a la candidata, para confirmar la versión, pero no contestó. Hasta la próxima semana. tiochiro@hotmail.com @tiochiro.
Por Aquilino Cotes Zuleta