Los 25 municipios del Cesar cuentan con operadores que se encargan de ejecutar el servicio de recolección de basuras, pero estos no abarcan todos los corregimientos y veredas.
En el caso de Interaseo de las basuras en el casco urbano de Valledupar y en algunos corregimientos aledaños para disponer los residuos sólidos en el relleno sanitario Los Corazones. Sin embargo, las poblaciones que se encuentran en el sur del municipio no alcanzan a recibir el servicio.
El gerente de Interaseo, Cristian Martelo, manifestó que no tienen la obligación de prestar el servicio en todo el municipio porque así lo establece el contrato. Argumentó que “hay puntos excesivamente lejanos” a la ubicación del relleno donde se disponen los residuos sólidos.
“Nosotros prestamos el servicio en corregimientos del norte como Guacoche, Guacochito, El Jabo, La Mina, Los Corazones, entre otros; y en el sur llegamos hasta Valencia de Jesús. En conclusión, de los 25 corregimientos del municipio hacemos el trabajo en los 12 que están más cerca. No lo hacemos como obligación de Interaseo, se hace como una solicitud hecha por anteriores administraciones y no estamos cobrando el servicio. Por ejemplo, los corregimientos Mariangola, Santa Cecilia, Aguas Blancas, entre otros, están lejos de la ubicación del relleno. En la parte rural prestamos el servicio como parte de responsabilidad social, pero no porque nos toque. No hacen parte de las obligaciones”, explicó.
Agregó que la empresa llega hasta donde puede operacionalmente, de lo contrario se pone en riesgo la prestación del servicio en la zona urbana de Valledupar. También piensa que se requiere de la voluntad de la Alcaldía para solucionar esa situación.
“La idea es que a las comunidades de esas zonas se les cobre la tarifa, pero las administraciones anteriores no estaban muy interesadas en que eso se hiciera. Por ejemplo, al estrato 1 se le cobraría unos $15.000, si se piensa que el carro de basura pasaría tres veces por semana por la casa del usuario y que cada viaje cueste $1.800”, subrayó el gerente de Interaseo.
Ampliando el panorama, EL PILÓN encontró que con Aguas del Cesar ocurre algo similar. La empresa, a través de la operadora Bioger de Cartagena, presta el servicio en 11 municipios (Astrea, Bosconia, Curumaní, El Copey, El Paso, Gamarra, La Gloria, La Jagua de Ibirico, Pailitas, San Alberto y Tamalemeque) y solo en ocho corregimientos, que son: Líbano, La Palma y Machete, en San Alberto; Arjona y La Y, en Astrea; La Loma y Cuatro Vientos, en El Paso; y Caracolicito, en El Copey.
En esas poblaciones se recogen más de 3.400 toneladas promedio al mes, se barren más de 5.000 kilómetros y hacen la disposición final en los rellenos sanitarios de Bosconia y Las Bateas en Aguachica.
¿Qué pasa con las demás poblaciones? Ante esta pregunta, la directora de Operaciones de Aguas del Cesar, Yaneth Arias, respondió que la entidad tampoco tiene la obligación de prestar el servicio, tal como ocurre con Interaseo. Pero la funcionaria fue más allá al indicar que llegarán a las zonas rurales de acuerdo con las solicitudes que haga el municipio que lo desee, teniendo en cuenta que este no es un servicio gratuito (Ley 142, sobre servicios públicos).
“Como en la parte rural no existe un esquema tarifario, el municipio debe hacer la solicitud y acordarlo con la entidad que opere la disposición de residuos sólidos, ya sea que la administración lo cancele o se haga a través de los usuarios”, explicó Arias.
Los rellenos sanitarios
En Cesar solo están habilitados tres rellenos sanitarios: Los Corazones, en Valledupar; el de Bosconia, y Las Bateas de Aguachica (ver infografía). Los residuos sólidos de siete de los 11 municipios que interviene Aguas del Cesar son dispuestos en el relleno sanitario de Bosconia, pero también a este lugar es trasladado el material que se recoge en Chimichagua, el cual tiene su propio operador. Se invirtieron $2.500 millones para construir el relleno sanitario.
Por otra parte, los residuos de los cuatro municipios restantes que hacen parte del esquema regional para la prestación del servicio de aseo de Aguas del Cesar se están disponiendo en el relleno sanitario Las Bateas.
“Los otros municipios que no están en el esquema, como Río de Oro, San Martín, González, Chimichagua y Chiriguaná, están prestando el servicio a través de su empresa prestadora o a través de la unidad de servicios públicos, en algunos casos. Estos cinco municipios están dentro de nuestras metas de incluirlos dentro del esquema regional de aseo, próximamente”, indicó Yaneth Arenas.
Río de Oro y González disponen los residuos sólidos en el relleno sanitario del municipio Ocaña, en Norte de Santander. San Martín, en cambio, tiene un contrato con una empresa para que haga la disposición final en Las Bateas.
Sobre esta situación el secretario de Ambiente en Cesar, Andrés Arturo Fernández, lamentó el déficit que hay para prestar el servicio de aseo en todo el departamento, pero consideró que la labor que cumplen los rellenos sanitarios actuales han dado una ayuda importante para evitar contaminación en los municipios, muy distante a lo que ocurría años anteriores cuando existían muchos botaderos de basura a cielo abierto y había poca operación para la recolección de los residuos sólidos.
A pesar de eso, las autoridades ambientales en Cesar reconocen que sí existen algunos botaderos de basura a cielo abierto en las zonas rurales del Cesar que no están cobijados por los actuales esquemas de recolección.
EL PILÓN intentó comunicarse con los alcaldes de Valledupar, Becerril, Manaure, El Paso, Río de Oro, El Copey, Pueblo Bello, entre otros, para que dieran declaraciones sobre esta problemática que aqueja a los municipios que administran, pero ninguno contestó el celular.
Ríos como botaderos
Las autoridades ambientales han encontrado en varios lugares del departamento que los riachuelos son utilizados por la comunidad como botaderos de basuras, generando con estas prácticas contaminación en las fuentes de agua. En 886 municipios del país hay rellenos sanitarios, ayudando a que los ríos no sean usados como botaderos.
Aguas del Cesar, que a través de un operador, se encarga de la disposición de residuos sólidos de 11 municipios y de solo ocho corregimientos.
Sanciones a Chiriguaná
Corpocesar mira con lupa las acciones que viene haciendo la Alcaldía de Chiriguaná en cuanto a la disposición de los residuos sólidos. Esto se debe a que el municipio no cuenta con un sitio legalizado para hacerlo y tampoco hace uso de alguno de los tres rellenos sanitarios que hay en el departamento, incluso Bosconia, que está cerca.
Por lo tanto, el operador del servicio está haciendo la disposición de los residuos en un botadero a cielo abierto, acción que las autoridades ambientales sancionarían.
En el 2014, Corpocesar inició un proceso sancionatorio en contra de este municipio por incumplir el Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos (Pgirs), de acuerdo con el informe de gestión de esa entidad. Lo grave es que también hubo proceso sancionatorio los años 2010 y 2013.
Por medio del decreto 1077 de 2015, Corpocesar está obligado a hacerle seguimiento a los planes de gestión integral de residuos sólidos que hagan los municipios para ver si se hace aprovechamiento de este material.
El ingeniero Eduardo López Romero, especializado en el tema de Saneamiento Básico de la oficina de Seguimiento de Corpocesar, manifestó que se están adelantando las acciones pertinentes para hacer las visitas en Chiriguaná y tomar las acciones que haya lugar.
Luego de que Corpocesar hace las visitas los resultados de estas son trasladadas a la oficina de Jurídica, quien seguirá con la indagación sobre el por qué se está presentando la irregularidad en la disposición de los residuos sólidos.
“Después de todo este seguimiento que se hace para saber por qué no se lleva el material a un relleno sanitario, Corpocesar emite un informe, le hace un requerimiento al alcalde de turno y lo manda a la oficina Jurídica de la corporación con el fin que se genere un trámite sancionatorio contra ese municipio”, explicó Eduardo López.
Se conoció que Corpocesar está viendo qué otros municipios no están cumpliendo con la normatividad.
En el 2014, Corpocesar también había iniciado proceso sancionatorio por incumplir el Pgirs en contra de los municipios La Jagua de Ibirico, Pueblo Bello, La Gloria y Valledupar. En contra La Jagua de Ibirico también se abrieron procesos sancionatorios los años 2009, 2010 y 2013.
Los municipios que sí cumplieron con el Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos en el 2014 son: Aguachica, Codazzi, Astrea, Becerril, entre otros.
Corpocesar le mantiene un proceso sancionatorio a Chiriguaná por no hacer la disposición de residuos sólidos en un relleno sanitario.
Por Rennier Asprilla