Ha sido muy polémico el proyecto de ley, presentado por el representante Rodrigo Rojas Lara, en virtud del cual se restringe el uso de los dispositivos de telefonía móvil, a las instituciones educativas en el nivel básico y secundario, tanto para los profesores como para los educandos. Aduce el congresista, entre otras razones, motivos de salud, en prevención de enfermedades asociadas al uso de estos dispositivos. La citada prohibición deberá ser incluida en el manual de convivencia de los colegios. La opinión pública se encuentra polarizada, unos a favor y otros en contra. No obstante, quiero expresar mi punto de vista. Si bien es cierto, la tecnología es de mucha ayuda en el proceso educativo del educando, también es cierto que con ella se ha destapado una verdadera Caja de Pandora, por el uso excesivo de estos dispositivos, que han dado lugar a diferentes trastornos de comportamiento, sin desestimar factores exógenos asociados con la inseguridad. Cabe preguntar, entonces ¿Será que el uso de los celulares dentro del aula de clase, con fines estrictamente pedagógicos, es una materia que necesariamente debe regularse mediante ley de la república?
Considero, que es una decisión que debe ser tomada por toda la comunidad educativa, de manera libre y democrática, atendiendo las necesidades, y su situación en particular. No hay que generalizar, que es precisamente lo que hace la ley, pues habrán casos en que restringir el uso de estos dispositivos sea lo más recomendable, pero pueden haber excepciones. Otra: ¿Dar el mismo tratamiento al nivel de básica primaria, que al nivel de secundaria, es lo más recomendable? Considero que no. Pues no es lo mismo hablar de un niño de 6 años, que está más expuesto a los riesgos que se derivan del uso del celular, que un adolescente de 15 años. Ahora bien, el presidente de Uruguay, Tabaré Vásquez, implementó un programa donde todos los niños de su país pudieran acceder a un computador personal. Pregunto: ¿Y es que acaso solo se puede tener acceso a redes sociales a través del celular? ¿Por qué las tabletas sí, y los celulares no?
El pasado ministro de las TIC se la pasó dotando de tabletas a diferentes colegios como aporte a su proceso educativo, con la venia de los alcaldes de cada municipio, y nadie se mostró en desacuerdo. Otro aspecto a considerar es el de la salud, pues el uso de estos dispositivos, se asocia con algunas enfermedades como el cáncer. Pregunto: La tiza, con la que muchos profesores enseñaron a generaciones enteras, y que aún se usa ¿No genera riesgos? El tema está para ser debatido, pero soy de los que piensan que la decisión debe ser tomada por cada uno de los colegios, de manera libre y autónoma, atendiendo las circunstancias particulares de cada institución. Insisto, que el tema no debe tener la ley, como camisa de fuerza, sino que debe ser fruto de una decisión consensuada.
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