La plenaria del Parlamento Andino a través de una sesión ordinaria declaró a la Casa Beto Murgas, Museo del Acordeón, un referente cultural de la región Andina.
El Parlamento Andino que es un órgano supranacional y democrático de la comunidad Andina que integra los territorios de Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile y Argentina, tiene entre sus misiones afianzar la identidad y la cultura andina.
El museo que es en donde se encuentra una de las más grandes colecciones de acordeones en el territorio Latinoamericano fue creado por José Alberto Murgas Peñaloza, compositor vallenato, quien apasionado por la música y el folclor, decidió construir un recinto que resaltará la importancia del acordeón que representa el Caribe colombiano.
“Se resuelve declarar a la Casa Beto Murgas, Museo del Acordeón, ubicado en Valledupar Colombia como un referente cultural de la región Andina, por ser el único museo de ese instrumento en Colombia”, dice un aparte de la Resolución emitida por el Parlamento Andino.
La Casa Beto Murgas, que es un lugar representativo en la historia musical del vallenato, ha tenido un recibimiento significativo en todos los habitantes de la ciudad y a nivel internacional.
“Está declaración representó mucho, no tanto para mí, sino para la cultura vallenata, para la gente de la ciudad y por supuesto a todos nos enaltece que una entidad como estas haya tenido en cuenta a Valledupar, a un lugar que hemos hecho con sacrificio y apoyo familiar y amigos ”, manifestó Alberto Murgas.
HISTORIA DEL MUSEO
En el año 1982, José Alberto Murgas Peñaloza fundador del museo, como un apasionado de la música y el folclor vallenato, adquirió un acordeón de dos hileras como un regalo para su hijo Alberto José Murgas.
Debido a esto, tiempo después Murgas Durán, gracias al interés despertado por el instrumento decidió investigar, conocer y profundizar en la historia y origen del mismo.
Al haber identificado marcas, nombres y los países fabricantes de los primeros y más antiguos acordeones decidió iniciar una colección de estos, consolidando así, el primer espacio de acordeones en la ciudad, al cual llamó Casa Beto Murgas.
Luego de un proceso, el Ministerio de Cultura en el año 2013 a través del Programa de Fortalecimiento de Museos certificó a la Casa Beto Murgas como un museo del acordeón.
“Este es un lugar donde se representa la cultura vallenata de una forma muy digna, es algo que a todos los que vivimos en esta región nos enaltece”, agregó el compositor.
Como propósito fundamental de este museo estuvo reconocer al género musical vallenato como generador de espacios culturales que fortalecerán los conocimientos y la historia de la música y el folclor patrimonio inmaterial de la humanidad.
“La Casa Beto Murgas ofrece una visión global sobre este instrumento. También permite apreciarlo de cerca, entender las distintas etapas de la evolución. Enseñar aspectos de la juglaría y analizar los cambios en la música vallenata por los cantantes y compositores”, cita la Resolución emitida por el Parlamento Andino.
CON SUEÑOS
José Alberto Murgas como fundador del Museo ha generado este espacio cultural con la finalidad de seguir creciendo y aportando de manera significativa a la región Caribe.
“Nosotros antes de esto que se dio ya teníamos pensado ampliar el museo y seguir investigando, para ser competitivo con otros lugares. Aunque lo que hago yo es poco común y yo tengo la integralidad de tocar acordeón, soy investigador, compositor, tengo entonces una esencia que me facilita todo lo que estamos haciendo”, expresó el fundador.
Asimismo, manifestó Murgas que deberían replicarse estos espacios que exaltan la historia y la música de los instrumentos que hicieron y hacen parte del vallenato, pues según él.
“A los orientadores, los rectores, docentes y secretaria municipal y departamental deben tener claro que dándole a los niños un concepto de la cultura nos iría mejor como ciudad, que la gente tenga claro que es la cultura vallenata, cómo nació, cómo llegó el instrumento que nos simboliza hoy a nosotros”, agregó Beto Murgas.
FALTA DE APOYO
De manera enfática, Murgas aseguró que no ha recibido apoyo de ninguna entidad y que en Valledupar se tienen diferentes espacios culturales que los habitantes de la misma ciudad no los conocen.
“Si la gente se interesará a ese nivel gubernamental nosotros seríamos una ciudad maravillosa”, puntualizó el compositor.
Por Melissa Valle
Melissavallesuarez@gmail.com