Querida Consuelo,
Es un honor dirigirme a ti recordando tu famosa ‘Carta Vallenata’ de hace poco más de cincuenta años. Permíteme expresar mi admiración por tu determinación, así como por tu compromiso con la música vallenata y la defensa de sus raíces en un momento en el que la comprensión y apreciación de este género estaban en discusión.
Hoy, en el 2024, me complace informarte que el vallenato ha experimentado una increíble evolución y ha logrado conquistar no solo corazones colombianos, sino audiencias alrededor de todo el mundo. Tus preocupaciones sobre la posible influencia de la academia en la esencia auténtica del vallenato han encontrado un equilibrio sorprendente en la actualidad, complementándose entre sí.
La música vallenata ha mantenido su autenticidad, siendo crónica del día a día, acompañándose de sentidas melodías, pero ha abierto sus brazos a diversas influencias y colaboraciones. Los artistas actuales, conscientes de la riqueza de su herencia musical, han encontrado formas de fusionar el vallenato con otros géneros, creando sonidos únicos y universales, permitiendo un diálogo intercultural que ha contribuido a la preservación de la esencia del vallenato, al tiempo que lo proyecta hacia nuevos horizontes.
El reconocimiento internacional del vallenato es innegable. Artistas vallenatos han colaborado con músicos de diferentes partes del mundo, llevando nuestras historias y tradiciones a escenarios globales. La improvisación y autenticidad que tanto valorabas en el vallenato son ahora estimadas como características únicas que han camelado a auditorios diversos y han enriquecido la escena musical global.
La música vallenata ha encontrado su lugar en festivales internacionales. Sus exponentes son reconocidos como embajadores de la riqueza cultural colombiana. La fusión de instrumentos tradicionales con elementos modernos ha dado lugar a interpretaciones innovadoras que respetan la esencia del vallenato, al mismo tiempo que conectan con un público contemporáneo. La tecnología y la globalización han permitido que la música vallenata trascienda fronteras; ahora se encuentra al alcance de un público más amplio. Plataformas digitales y redes sociales han proporcionado un espacio para la difusión y valoración del vallenato, permitiendo que nuevas generaciones descubran y amen este tesoro.
Con todo y novedad, el legado que nos han dejado maestros como Rafael Escalona, Tobías Enrique Pumarejo, Leandro Díaz, Gustavo Gutiérrez, entre más que no menciono —porque son tantos los que han contribuido a nuestra tradición—, habremos jóvenes comprometidos con seguir defendiendo y resguardando nuestras raíces. La esencia del vallenato persiste, se seguirá manteniendo por todos los apasionados porque nuestra historia se siga compartiendo a lo largo del mundo. Hoy, tantos años después, yo misma te hago el compromiso: el vallenato se seguirá tomando el mundo.
Con gratitud y respeto,
Una joven que espera tener tu misma berraquera para defender lo de su casa y llevar la cultura vallenata a lo más alto.