Piden apoyo del gobernador
Campesinos de la vereda Pitalito, jurisdicción del municipio de Chimichagua, se tomaron la plazoleta de la gobernación para pedirle apoyo al gobernador del Cesar, porque fueron despojados abruptamente de sus parcelas.
Las 20 familias desplazadas de la vereda Pitalito, que se ubicaron al frente de la gobernación denunciaron atropellos por parte de la fuerza pública y anunciaron que no se devolverán hasta que les den una solución, por parte del gobierno departamental.
De acuerdo a lo expresado por Gustavo Guerra, uno de los campesinos desplazados, desde hace más de 20 años tienen posesión de la tierra y en los últimos meses han tenido problemas con Juan Manuel Fernández de Castro, quien dice que es el propietario de los predios.
“Este señor llegó comprándonos las tierras y como no hemos accedido a vender porque los campesinos de la vereda Pitalito, tenemos esos terrenos para trabajar y no para negocio. Eso parece que no le gustó al señor Juan Manuel Fernández de Castro, quien nos sacó a la fuerza con el Ejército y la Policía”, expresó.
Los campesinos quienes en primera instancia se desplazaron para el municipio de Curumaní y luego para Valledupar, piden que el gobernador les ayude a solucionar esta problemática o que los reubique en otras tierras donde puedan conseguir el sustento de sus familias.
“Nosotros fuimos desplazados por los grupos al margen de la ley y ahora que estamos poniendo a producir la tierra nuevamente, un terrateniente nos saca a las malas de nuestras parcelas”, dijo Gustavo Guerra.
Opinión de los campesinos
Gustavo Guerra – desplazado: nosotros somos habitantes de la vereda desde hace más de 20 años, la finca estaba en manos de los colonos, pero con la violencia muchos se fueron, luego nosotros comenzamos a trabajar la tierra porque el señor Manuel Chacón, nos dijo que nos quedáramos con las tierras, quisimos arreglar con la esposa de él y con el Incoder, pero Incoder hizo los estudios y determinó que los terrenos aparecen como territorio baldío de propiedad del estado, ahora apareció un señor Juan Manuel Fernández de Castro, para que le vendiéramos las tierras pero como nadie accedió a vender, nos echó al Ejercito y a la Policía para que nos sacaran de las parcelas.
Ya nos habían desplazado los violentos y ahora la misma fuerza del estado, por eso estamos pidiéndole al gobernador quien se comprometió con nosotros a que nos solucione esta situación o que nos reubique, para seguir trabajando la tierra y conseguir el sustento de nuestras familias.
Ester Martínez: Nosotros sólo queremos que se haga justicia, porque hemos sido atropellados y sacados de nuestras tierras. Queremos que se haga justicia por el bien de todos estos niños que han quedado en la calle.
Alix María Salazar: Nos sacaron de nuestras parcelas con amenazas, llegaron con el ejército y la policía y nos hicieron salir a las malas. Nos tocó irnos con los niños y varias mujeres embarazadas para Curumaní, ahí nos quedamos en la calle y por eso venimos a buscar la ayuda del gobernador.