Durante el conversatorio sobre el libro ‘La costa nostra’, de la periodista y escritora Laura Ardila Arrieta, un personaje del público, al destacar las cualidades de esta mujer, preguntó en privado, a la persona que tenía a su lado en el auditorio, el por qué los columnistas de EL PILÓN todos son hombres.
Resultó ser una interesante pregunta, a sabiendas de que en Valledupar hay muy buenas escritoras, no obstante, en el listado de columnistas de EL PILÓN no hay una mujer que escriba de manera fija todas las semanas, algunas de forma muy esporádica.
Hemos contado con valiosas letras como Mary Daza Orozco, Consuelo Araujonoguera (fallecida), Ruth Ariza, Yanitza Fontalvo, Ana María Ferrer, Lolita Acosta (fallecida), Omaira Herrera, Nurys Pardo, Giomar Guerra, Cenaida Alvis, Marce Urón, Claudia Margarita Zuleta, Yarime Lobo, Gelca Gutiérrez, Lolita Celedón, Mariana Orozco, entre otras importantes.
Ello indica que falta de recurso humano no es, pero tampoco de medios de comunicación, tal vez ha faltado, en algunas de ellas, un tanto de disciplina y constancia. Nada fácil de explicar cuando son líderes en tantos campos de la sociedad.
Qué bueno sería que en la era de la información y la comunicación instantánea, juegan un papel en la formación de opiniones, la difusión de ideas y la configuración del discurso público, hubiese mayor participación de la mujer.
Hoy, más que nunca, es meritorio reconocer su contribución en los medios, no solo como una cuestión de justicia y equidad, sino también como una necesidad para enriquecer y diversificar.
Las mujeres columnistas aportan perspectivas únicas y variadas que reflejan experiencias, preocupaciones y realidades a menudo ignoradas o minimizadas en las narrativas dominantes. La inclusión de voces femeninas asegura que se cubran temas relevantes para una amplia audiencia, desde la salud reproductiva y la igualdad de género hasta la violencia de género y la representación política.
La presencia de mujeres en roles de liderazgo dentro de los medios de comunicación constituye un modelo a seguir para las nuevas generaciones. Ver a mujeres vallenatas destacadas en columnas de opinión y análisis puede inspirar a jóvenes y niñas de esta región a perseguir carreras en periodismo y escritura, fomentando así la equidad de género en una industria históricamente dominada por hombres. Además, estas mujeres sirven como ejemplos vivos de cómo podrían influir y cambiar la narrativa pública.
Las columnistas mujeres pueden brindar un enfoque riguroso y analítico como el de sus colegas masculinos, pero con una sensibilidad y una perspectiva que enriquecen la comprensión de los problemas tratados.
Desde EL PILÓN presentamos un mea culpa, porque la igualdad de género en el ámbito de los medios es un derecho fundamental que debe ser respetado y promovido, pero es a ellas a quien les corresponde tomar la iniciativa, aquí les ofrecemos estos espacios porque somos conscientes que al garantizar que las mujeres tengan las mismas oportunidades para expresarse y ser escuchadas, estamos cumpliendo con esa obligación ética.
Desde estas líneas resaltamos la importancia de las letras femeninas en los medios de comunicación y somos conscientes que la diversidad de voces es nuestra mayor fortaleza como medio de comunicación líder de la región.