Sandra Santiago B.
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Son pocas las cosas en las que el departamento del Cesar es pionero y una de esas es en la producción de biodiésel, un 'invento' que se le ocurrió al exministro de Agricultura, Carlos Murgas Guerrero y que hoy está entregando grandes resultados al país y al mundo. Solo el año pasado aportó 70 mil toneladas de las 500 mil que se produjeron en el país, es decir un 14%.
En Codazzi, Cesar, en julio de 2007 el expresidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, inauguró una de las primeras cuatro plantas de producción de biodiésel, desde entonces son muchas las oportunidades que con Murgas Guerrero se abrieron en este campo, debido a que este combustible a diferencia del que proviene de fósiles, le aporta al medio ambiente e involucra en su producción cultivos de palma como las que hoy están sembradas no solo en ese municipio, sino en Aguachica, La Gloria, San Alberto, San Martín, entre otros.
Los combustibles, en este caso el biodiésel de palma ayudó a regular los precios de la materia prima en unos momentos en que esta no valía nada, pero gracias a este 'invento' hoy es uno de los cultivos mas rentables del país.
Luego de este primer paso del cesarense, vinieron otros más y hoy existe una industria floreciente, recordó el ex ministro de Obras y Transporte e ingeniero de petróleo, Jorge Bendeck Olivella, quien dijo que otros palmicultores imitaron a Murgas.
“En el Cesar existe un gran potencial, lo que se requiere es agua y sobre todo la voluntad de los jóvenes herederos de la zona que entiendan que en la región es en donde hay que trabajar y no quedarse en Bogotá, Medellín u otras ciudades del país, porque la región los necesita y las oportunidades están allá. Una de las grande cosas que puede hacer el Cesar bien es incrementar la producción de biocombustibles, porque las tierras están disponibles y nos falta un poco de agua en el verano lo cual se puede resolver con el liderazgo de las autoridades”, afirmó Bendeck Olivella.
Según el experto, los combustibles de origen vegetal como el aceite de palma que se transforma en biodiésel o el jugo de la caña de azúcar que por fermentación se convierte en etanol no tienen los componentes contaminantes como los que provienen de los fósiles, caso de la gasolina y el ACPM, “de tal manera que el mundo lo ha entendido así, la molécula tanto del biodiésel como del etanol tienen en su estructura átomos de oxigeno, la combustión en los motores es mucho mas perfecta que en el caso de los combustibles fósiles que toman el oxigeno del aire, el etanol es una súper gasolina, tiene 120 octanos que mide la capacidad del combustible de cascabelear, cuando la gasolina corriente, la gasolina extra que en Colombia es mezclada con etanol se fusiona de manera perfecta y las emisiones a la atmósfera son mucho menos y el monoxido de carbono que es tan negativo, es prácticamente nulo en la combustión cuando existe el etanol o cuando existe el biodiésel en el ACPM”.
Para Bendeck Olivella los biocombustibles, son un combustible de transición y estos estarán en la canasta de los energéticos líquidos hasta el año 2050 o hasta el momento en que se descubra los súper combustible, como los es el hidrógeno que es muy fácil de obtener pero muy costoso de producir.
No es puro
En Colombia y debido a que en el pasado, las ciudades eran grises por las emisiones de azufre, Ecopetrol se vio obligado a bajarle esta impureza y en el caso de los biocombustibles cuando son mezclados, este le aporta su granito de arena para disfrutar de un mejor ambiente.
Es así como en el país no se expende gasolina ni ACPM ciento por ciento puros, solamente en la frontera por el combustible de contrabando que viene desde Venezuela, mucho del cual se pasa para el Cesar.
En ese sentido y según el exministro de Obras y Transporte los combustibles venezolanos no tienen las características que sí tienen las colombianas para ser una mezcla perfecta “y Ecopetrol antes de que iniciacemos la producciones tuvo que cambiar las dietas de las refinerías para producir estos combustibles compatibles con los biocombustibles”.
Es así como en Colombia la gasolina tiene un 8% de etanol en cualquier lugar del país a excepción de la frontera, mientras que el biodiésel de palma está mezclado en el ACPM en toda la costa norte y en otras regiones del país en un 10% y en Bogotá en un 9%.
Por buen camino
Según Carlos José Murgas (hijo de Carlos Murgas Guerrero) el tema del biodiésel va por buen camino, desde que empezaron en 2007 y a la fecha el producto como la venta se han consolidado.
“Fuimos los primeros en Colombia y los primeros en Latinoamerica en hacer biodiésel de la palma directamente con trabajo cesarense. Con nosotros se abrió una mezcla a nivel país del 2% y logramos consolidar la producción a un 5%, en zona de frontera del 2%, en la zona central estamos casi en el 9% y en las otras zonas en un 6% de mezcla de biodiésel con el diséll fósil”, explicó Murgas.
Según el empresario, en el departamento entre fincas propias, asociadas y proveedoras cuentan con alrededor de 14 mil hectáreas y llevan varios procesos industriales.
El primero es la extracción, para lo cual cuentan con una planta extractora de propiedad de Oleoflores, ubicada en Codazzi y otra con socios en el municipio de La Gloria, en donde además tienen 8 mil hectáreas del cultivo y una planta de 30 toneladas horas; también tienen el proceso de refinación donde sacan un aceite RBD (Refinado, Blanqueado y Desodorizado) que tiene dos finalidades, uno el fraccionamiento del producto para producir el aceite Oleoflor que lo venden a nivel nacional y las margarinas industriales, el 60% restante queda para la producción de biodiésel.
Otros productos
En el Cesar según recordó Murgas, se ha hablado de yuca, remolacha, entre otros productos para producir biocombustible, pero el tema de la palma ya está inventado, tiene historia y libros donde basarse, “tenemos la experiencia a nivel del Cesar, cuando hablamos de oleaginosas, tenemos que saber que la oleaginosa que mas aceite produce por hectárea año es la palma y si ya tenemos el negocio consolidado tanto en el departamento como en la costa norte del país, podemos seguir con la palma”.
Creciendo
La palma es una industria que crece, tanto desde el primer eslabón, es decir la semilla hasta las plantas extractoras.
Según Carlos José están haciendo unos trabajo industriales para separar la parte de alimentos con la de biocombustibles y están pensando en un proyecto de ampliación a biodiésel y un nuevo proceso a mediano plazo de oleoquímico.
En cuanto a plantaciones, tiene nuevos socios con sembrados en Badillo (norte de Valledupar), La Jagua de Ibirico, Becerril, Tamalameque y en Regidor (Sur de Bolívar)
Siembras
En el Cesar, los cultivos de palma se localizan en los municipios de Codazzi donde están las plantas de beneficio de aceite: Extractora Sicarare, Oleoflores y Palmacará; en Bosconia: Extractora Palmariaguaní; en El Copey: Palmeras de la Costa; en El Paso: Palmagro; en Aguachica: Agroindustrias del Sur; La Gloria: Extractora La Gloria; San Alberto: Industrial Agraria La Palma y en San Martín está Palmas del Cesar.
Incorporar la minería
El Cesar se ha consolidado en el tema del biocombustible y según el presidente de Fedepalma, Jens Mesa Dishington, es fundamental que se incorpore todo el sector de la gran minería, sobre todo el carbón que importan combustible diésel, “pero que hoy todavía tiene una excepción para mezclar biodiésel. El gobierno nacional nos ha informado que está trabajando en eso y confiamos que muy pronto vamos a tener mezcla para esa importación con lo cual el mercado para estas plantas ya instaladas se va a mejorar”.