Hace un año celebrábamos con entusiasmo y mucha expectativa que el 2020 sería un año de prosperidad y visión perfecta, pero apareció el coronavirus y literalmente nos tapó la boca, mostrándonos lo frágiles que somos, quebrantando los gobiernos, las economías, los sistemas de salud y tiñendo con miles de víctimas una triste realidad que deja una profunda herida en la humanidad, aun así, nos quedan muchas enseñanzas y la esperanza que después de esta oscura tragedia brille una buena estrella.
Y precisamente como no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista, pasa el tiempo y se termina el año de la covid-19 y a pesar de los difíciles momentos que vivimos, y aunque aún siguen los contagios masivos, desde hoy celebramos la llegada de los Reyes Magos, que desde Oriente con mensajes de bondad y esperanza para este 2021 vienen cargados de regalos y no solo de oro, incienso y mirra, sino también de tapabocas, alcohol, la anhelada vacuna contra esta horrible pandemia y otros tantos detalles que siempre soñamos.
De esta forma, Pfizer, Moderna, BionTech, Sinopharm, Sputnik V y AstraZeneca, como regalos de reyes han sido anunciadas con bombos y platillos para que por fin se aplaque la furia de la temible covid-19 y así mientras tanto en Colombia, también le pedimos a los Reyes Magos posibles curas para acabar con los males que agobian al país, especialmente contra la corrupción que tanto daño le ha hecho a esta maltratada patria, aunque estamos seguros que desde el Congreso se opondrían a un intenso plan de vacunación contra este flagelo, donde siempre reinan y están presentes los honorables ‘Malestar’, ‘Va a Robar’ y ‘Va a Mentir’.
De igual manera una vacuna contra la desigualdad y la pobreza no nos caería nada mal y mucho menos después de lo devastada que ha quedado la economía del país, por eso también le pedimos a Melchor, Baltasar y a Gaspar, montados en sus fieles animales, mucho ‘camello’ para todos los desempleados en el país y de paso que también brille una buena estrella para los amenazados líderes sociales que en Colombia parece que los persiguiera un Herodes.
Así deseamos de todo corazón, llenos de fe y esperanza, que para este año la estrella de Belén nos conduzca por el buen camino de la felicidad, la paz y el amor. Que la abundancia, representada en el oro que nos trae Baltasar, esté presente en todos los hogares colombianos, así mismo que también se le aplique un buen desahumerio al país con el mejor de los inciensos de Gaspar para que se espante la politiquería y reine la prosperidad y con la mirra de Melchor, como bálsamo precioso, que se alivien las penas de un doloroso 2020 por la covid-19.
Ñapa 1: Los que sí nos visitan a diario en Valledupar son los Reyes Magos de la inseguridad: ‘Malechor’, ‘Va a Asaltar’ y ‘Va a Atracar’. Esperamos que después de un año de aprendizaje para este 2021 en materia de seguridad por fin se estrene la robada autoridad.
Ñapa 2: El coronavirus no se ha ido y aunque deberíamos estar preocupados por los miles de contagios diarios, parece que salimos a celebrar el anuncio de la llegada de las nuevas vacunas sin tener en cuenta los protocolos de bioseguridad. La irresponsabilidad social salió nuevamente a flote y para esto sí que no hay cura. ¡Mucho cuidado!