“Ya no soportamos más esta situación, exigimos una pronta solución”, así se manifestaron los habitantes de un sector del barrio Villa Castro, al suroriente de Valledupar, por los continuos rebosamientos de aguas negras por los manjoles y sifones de las viviendas.
Los vecinos indican que este problema no es actual, que desde hace varios meses esto viene ocurriendo y ya ha generado enfermedades en la piel como hongos y daños estomacales por los olores que se intensifican en las horas del mediodía cuando la temperatura aumenta.
EL PILÓN recibió una denuncia de la comunidad que habita en la calle 24 entre carreras segunda y tercera, de Villa Castro, donde este medio constató que dos de las alcantarillas del sector estaban en constante rebosamiento de aguas negras.
Pero una situación que preocupa más a los residentes es que el único hogar infantil donde pueden dejar a sus hijos para ir a trabajar, por estos días no está en funcionamiento debido a que el patio donde se recrean los pequeños parece una piscina pero con aguas residuales.
Gloria Mendoza, madre comunitaria y administradora del hogar infantil dice que tiene a su cargo 14 niños y por esta situación que en los últimos días ha ido de mal en peor, ha tenido que regresar a sus pequeños para evitar enfermedades.
Y es que no está demás la solución a la que se vio obligada a tomar la madre comunitaria, debido a que el sitio donde se recrean los menores tienen un alto grado de infección.
Según Gloria, cuando bajan las aguas negras se arma con botas pantaneras, guantes de caucho y desinfectantes para limpiar el lugar, “Me pongo las botas, los guantes, luego comienzo a rociar agua y después con fab y límpido lavo todo, luego de eso echo agua hirviendo para desinfectar aun más”.
A pesar de este improvisado modo de desinfección que utiliza Gloria Mendoza, con lo que no ha podido lidiar ella y los demás habitantes, son los olores que con el sol se tornan más fuertes.
“Yo vivo con mi mamá de 86 años, me tocó enviarla a la casa de otro familiar porque ya se me estaba enfermando por los olores”, dijo la madre comunitaria.
Emdupar respondió
Ante las constantes quejas y denuncias hechas por la comunidad EL PILÓN se puso en contacto con el jefe del departamento técnico de Emdupar, Álvaro Yaguna, y según el funcionario en el sector afectado ya se encontraba un carro succionador trabajando, “Ya tenemos trabajando el carro en la calle 24 con carrera 4g, ese sector donde tenemos una dificultad ahí y ya estamos tomando las acciones pertinentes para controlar ese problema”.
Por otro lado la comunidad manifiesta que no han visto dicho vehículo trabajando por el sitio afectado, pero según Álvaro Yaguna, el sector donde se encuentra la maquina succionadora es el mismo, “Es el mismo sector, es bastante deprimido pero estamos trabajando porque tienen dificultades con las tuberías, son unas conexiones que no se hicieron bien en su momento por lo que estamos tratando de hacer la corrección respectiva”.
El funcionario también hizo un llamado a la comunidad en la colaboración de no arrojar desechos por estas cañerías que por su tiempo de uso ya están deterioradas.
“En el sector ya hemos hecho los estudios correspondientes para hacer las reposiciones, esas actividades ya están incluidas en el plan de inversión del 2014 y se van a comenzar cuanto antes porque estamos consientes de que esa problemática tenemos que solucionarla”, indicó Yaguna.
Puntos de vista
Gloria Mendoza, madre comunitaria “Yo tengo a mi cargo 14 niños, y por el rebosamiento de las aguas no puedo cuidarlos”.
Julio Nieves, habitante “Frente a mi casa hay un alcantarillado, tengo hijos pequeños y eso nos perjudica”.
Mohamed Osman Díaz
mohamed.osman@elpilon.com.co