Imelda Daza Cotes
La historia económica refleja que entre el sistema bancario y el Estado ha existido siempre una relación íntima, estrecha, umbilical, de la cual los banqueros han derivado mucho poder y beneficios económicos. Eso explica por qué en la crisis actual de deuda pública y déficits se adoptan políticas recomendadas por el Banco Mundial y el FMI que protegen y favorecen al sector financiero-especulador, protagonista de la crisis, mientras castigan severamente con la austeridad a sus víctimas
Latinoamérica también soportó crisis similares y aplicó erróneamente esas medidas, pero algunos países entendieron que el camino era la integración regional y la autonomía frente a los grandes centros de poder. En este contexto surgió la iniciativa del Banco del Sur y con él el SUCRE(Sistema Ùnico de Compensación Regional) para transacciones comerciales.
El Banco fue creado en 2007 en Buenos Aires. En septiembre 2009 Argentina, Bolivia, Brasil, Ecuador, Paraguay, Uruguay y Venezuela firmaron el Convenio Constitutivo en Polamar-Venezuela
El Banco del Sur ha sido concebido como una nueva alternativa financiera para la región y como un mecanismo integrador que disminuirá las asimetrías entre paises. Las reservas internacionales de Latinoamérica han estado siempre depositadas en bancos y organismos financieros europeo-norteamericanos, expuestas a los riesgos y embates de la crisis actual. Estos recursos pasarán ahora al Banco del Sur para ser administrados en función de los intereses regionales
Son ambiciosos y atractivos los propósitos con este Banco regional. Promoverá una integración multiple: política, productiva, comercial, ambiental, cultural. No será una institución de beneficencia pero administrará fondos especiales de solidaridad para atender calamidades públicas y emergencias colectivas. Sus programas y proyectos partirán de las prioridades sociales; es indispensable atender las necesidades básicas de los pueblos para poder marchar juntos hacia un futuro con desarrollo armónico y estable
El Banco operará con criterios de máxima eficiencia, será autosostenible, procurará generar nuevos recursos para reinvertir en la región, financiará obras de infraestructura, planes de desarrollo científico-tecnológico, proyectos que amplíen las cadenas productivas integradoras e incrementen el bienestar social
Los países-socios del Banco del Sur dejarán de transferir millones de dólares a los países industrializados, pondrán fin a las imposiciones del FMI y del BM, impulsarán la autonomía regional y serán dueños de su futuro.