Según el último reporte del Dane, en Valledupar disminuyó el desempleo. Del 16% marcado en marzo, en abril bajó al 15,5%.
Más que el número de ocupados, aumentó la población “fuera de la fuerza laboral”, es decir, las personas que teniendo la edad de trabajar no ingresan al mercado laboral porque no pueden, no lo necesitan o no están interesadas.
De 149.000 personas en marzo, el Dane reportó que la población fuera de la fuerza laboral de Valledupar aumentó a 153.658 en abril.
Este grupo lo integran estudiantes, mujeres y hombres dedicados tiempo completo a labores domésticas y de cuidado no remuneradas, pensionados, población incapacitada para trabajar, entre otras. Pero también lo conforman aquellos a los que no les llama la atención o creen que no vale la pena trabajar.
DOCE MESES DE CRECIMIENTO
Según el Dane, esta población ha crecido de forma constante en Valledupar en el último año. En comparación con abril del 2022, alrededor de 20.000 personas se sumaron a la población que no puede o no quiere trabajar.
La salida de esas personas del mercado laboral ha impactado las cifras de desempleo en Valledupar. ¿Por qué? Ante la disminución de personas buscando oportunidades, aunque no aumenten los puestos de empleo, sí disminuye el porcentaje de desocupados.
En los últimos 12 meses disminuyó el desempleo, pero no aumentaron los puestos de trabajo en la ciudad. De los 185 mil ocupados que había en Valledupar para abril del 2022, se redujo a 175,9 mil en 2023. Una reducción de casi 10.000 personas, según los cálculos del Dane.
Y aunque ahora hay menos personas trabajando que hace un año, el desempleo disminuyó 0,5 puntos porcentuales. En otras palabras, disminuyó el desempleo porque se redujo la población que busca trabajo, no porque haya más trabajo.
OCUPACIONES Y REGIÓN CARIBE
Pero, ¿cuáles son los sectores que más generan empleo en Valledupar? El sector comercio, de reparación de vehículos, y la administración pública, emplean a más de 64.590 vallenatos. Eso es uno de cada 3 empleados.
A nivel regional, Valledupar es la segunda ciudad con mayor porcentaje de desempleo, solo por detrás de Riohacha (15,8%). Al contrario, Santa Marta registró la tasa de desocupados más baja del país (8,8%). Sin embargo, el problema es que en estas ciudades manda ‘el rebusque’ o informalidad.
Por ejemplo, en Valledupar, el 62% de las personas ocupadas se dedica a labores informales, esto incluye al abogado independiente, pero también al vendedor o vendedora de fritos y jugos de la esquina. Situación similar se registra en Santa Marta y Riohacha. Contrario, Bogotá, Medellín y Manizales son las ciudades con empleos de mejor calidad.
En materia de empleo juvenil la situación tampoco es alentadora. Con un porcentaje de 25,2%, en Valledupar uno de cada cuatro jóvenes no tiene empleo. Según datos de Cesore, son más de 30.000 jóvenes que no estudian ni trabajan en la capital del Cesar.