En La Jagua de Ibirico, uno de los municipios con mayor producción de carbón en el Cesar, sus habitantes se inventaron una forma de medir la contaminación que deja la explotación y transporte del mineral.
Los jagüeros apagan todas las luces de sus casas, luego se dirigen al patio, encienden una linterna de mano y así observan el nivel de polución, las partículas de carbón que se impregna en el vidrio. Este experimento casero contraría a los realizados por las empresas mineras que aseguran que contamina más el polvo que se levanta al barrer el frente de las casas que la explotación en las minas de carbón a cielo abierto.
El departamento del Cesar con su producción de carbón aporta el seis por ciento que entrega la minería al Producto Interno Bruto, pero según los pobladores de municipios como El Paso, Chiriguaná y La Jagua de Ibirico, esa riqueza no la ven y por el contrario cada día se enferman más.
Precisamente para analizar las denuncias de las comunidades que conviven con la minería, la Asamblea Departamental realizó el pasado miércoles un debate donde fueron convocadas las empresas mineras, la población civil y las autoridades departamentales encargadas darle cumplimiento a una orden del Ministerio de Ambiente, a través de las resoluciones 0970 del 20 de mayo de 2010 y 1525 del 15 agosto del mismo año.
La intención de los diputados fue hacer seguimiento a los planes de reasentamiento que debían hacer las empresas mineras con las poblaciones afectadas por la explotación de carbón como Boquerón, El Hatillo y Plan Bonito, pero esta última ya fue removida, sin embargo, sus pobladores se están reorganizando en el mismo territorio tras el incumplimiento en algunos acuerdos. A las otras dos no les han cumplido pasados cuatro años y ocho meses.
En el debate estuvo la Secretaría de Salud a quien los miembros de la duma departamental solicitaron las estadísticas generales del año 2015 de enfermedades respiratorias y en la piel en los municipios de El Paso, Chiriguaná y La Jagua de Ibirico, que pertenecen al corredor minero.
La secretaria de Salud, Erika Mendoza, explicó que las cifras se establecen según año vencido, es decir, la sectorial presentó todos los casos del año 2014.
En ese sentido, para el municipio de Chiriguaná, se atendieron 5.060 consultas por enfermedades respiratorias, y enfermedades de la piel 693 casos. La mayor carga de enfermedad la aportan con el 29,15 % los residentes de 15 a 44 años, seguido de los de 1 a 4 años con el 20.26 %, y los de 5 a 14 años con el 17,81 %.
En El Paso se diagnosticaron enfermedades respiratorias por el orden de 7.023 patologías, y en temas de la piel y tejidos subcutáneos 1.765 casos, repartidos en pacientes de un 1 a 4 años, 5 a 14 y hasta 65 años.
Y el índice más alto se encontró en La Jagua de Ibirico, donde las entidades de salud reportaron 8,604 consultas por enfermedades respiratorias, la mayor carga de enfermedad la aportan con el 32,05 % de las consultas el grupo de edad de 1 a 4 años, seguido de los de 5 a 14 años con el 19,46 % y los menores de 1 año con el 15,24 %. Mientras que en enfermedades de piel 2.231 casos, la más consultada fue por dermatitis alérgica.
Claudia Cotes González, líder de salud pública de la Secretaría de Salud del Cesar, aseguró que la alerta en el corredor minero ya debería estar tomada porque “estas enfermedades en el caso de las patologías producidas por polvillo de carbón, las micropartículas, se depositan en los bronquios y pulmones y las consecuencias son enfisemas pulmonar, bronquitis y hasta cáncer de pulmón que se manifiestan en una edad avanzada”.
Agrego que la Secretaría de Salud está haciendo actividades en los municipios para que en el futuro las cifras no sean tan alarmantes.
Cabe anotar que en el 2013 más de 5.900 casos de infecciones respiratorias fueron atendidos en el hospital de La Jagua y en el 2014 las cifras aumentaron a 8.604 personas con afecciones similares, mientras que en La Loma, el 60% de los pacientes que llegan al puesto de salud lo hacen también afectados por estos mismos males.
La Nación debe aportar recursos
Frente a las alarmantes cifras de la Secretaría de Salud, Pedro Díaz Campo, secretario de Minas del Cesar, señaló que “las estadísticas son importantes porque nos están reflejando de que hay una problemática de salud pública que incluye a todos las autoridades locales, departamentales y nacionales”.
El funcionario pidió al Ministerio de Salud “un seguimiento de lo que está pasando en materia de salud en el corredor minero, porque la entidad nacional realizó un primer estudio hace varios años, pero no hemos tenido la continuidad en los procesos”.
Organismos de control denuncias
Un informe de la Contraloría General de la Nación y otro de la Defensoría del Pueblo en el Cesar señalan que multinacionales son las causantes de daños ambientales en el agua, el aire y en la salud de las poblaciones. Sin embargo, la empresa Drummond siempre ha defendido su trabajo de recuperación ambiental.
El año anterior, la Contraloría General presentó un informe en el que señala “la titulación minera desordenada, desprolija, improvisada y oportunista ha conducido a que el panorama sea realmente desolador”.
Dicho estudio argumenta que las multinacionales Drummond, Operación Conjunta La Jagua y Norcarbón han presentado informes difusos del monitoreo que deben realizar del impacto generado por la actividad minera.
El informe indica que la Drummond desvió el caño Noliza sin autorización alguna y presentó informes confusos. El texto advierte además que se intentará establecer si estas empresas son las causantes del detrimento en el patrimonio de 13.749 millones de pesos. De acuerdo a lo expuesto, estarían implicadas la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, y la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, Anla, por incumplir en la vigilancia y control.
Crecieron las enfermedades: Defensoría del Pueblo
En julio de 2014, el defensor del Pueblo Regional Cesar, Omar Contreras visitó el corregimiento de La Loma, en el centro de este departamento, para evaluar los efectos en la salud causados por la explotación de carbón y encontró con que los pobladores de la zona están sufriendo 22 tipos de enfermedades, en su mayoría respiratorias como asfixia, asma y bronquitis; además de manchas, brotes en la piel y hongos.
Otras patologías detectadas en la inspección de la Defensoría del Pueblo son casos severos de cáncer pulmonar, hipertensión, problemas gástricos severos, neumoconiosis, bronquiectasia, silicoantracosis, neuropatías, sinusitis y apnea del sueño.
Además el defensor Omar Contreras informó que hay indicios de pérdida del nivel cognitivo en los niños de ese corredor minero producto del hambre y las necesidades básicas que afectan las poblaciones.
Por último advirtió que esta zona no es propicia como hábitat para los humanos, ya que el aire y el agua están contaminados.
“Hay montañas de desechos tóxicos y polvillo que llegan al aire y amenazan la salud de sus habitantes. Los ríos albergan los químicos y desechos de la minería y los labriegos ya no pueden vivir de la pesca. La seguridad alimentaria en la zona está en peligro por la contaminación, las tierras han quedado esterilizadas y han desaparecido de la zona los cultivos tradicionales”, indica el informe de la defensoría.
La mayor incidencia en enfermedades respiratorias en Chiriguaná fue infección aguda no especificada de las vías respiratorias con 158 casos.
En 2013 más de 5.900 casos de infecciones respiratorias fueron atendidos en el hospital de La Jagua y en el 2014 las cifras aumentaron a 8.604 personas con afecciones similares.
La Defensoría del Pueblo encontró 22 enfermedades en el corredor minero, en su mayoría respiratorias como asfixia, asma, bronquitis y tos, además de manchas, brotes en la piel y hongos.
“Estas enfermedades en el caso de las patologías producidas por polvillo de carbón y las micropartículas, se depositan en los bronquios y pulmones, y las consecuencias son enfisemas pulmonar, bronquitis y hasta cáncer de pulmón”: Claudia Cotes, líder de salud pública.
Por Carlos Mario Jiménez / EL PILÓN
carlos.jimenez@elpilon.com.co